“La ciudad del año 1.454, tenía siete puertas y murallas que, empezando por poniente y siguiendo en sentido contrario a las agujas del reloj marcaban un antes y un después, en la historia de nuestra Alcalá de Henares.La de Madrid, por la que se accedía a la ciudad desde el extremo Oeste; la de Santa Ana o del Postigo, próxima a la actual plaza de la Victoria; la del Vado, situada al sur, en las proximidades del convento de lasDominicas de Santa Catalina de Siena; la de Fernán Falcón, emplazada al final de la calle de Santa Úrsula, en el extremo este; la de Guadalajara, al final de la calle Mayor, antes de la antigua plaza del Mercado, que entonces estaba extramuros; la de la Judería entre la calle Cervantes y Santiago y por último, la de Burgos, por la que se ingresaba en la ciudad desde el extremo norte.”
Calle Victoria
Saliendo desde la Plaza de los Santos Niños, nos encontramos la Ermita de Santa Lucía y al otro lado de la calle, el Colegio de Santas Justa y Rufina, que había sido construido como palacio para la familia Mendoza durante el siglo XVI y que fue inaugurado como colegio menor en 1.607.En su cara norte aparece ante nosotros la fachada principal del Colegio Convento de Mínimos de Santa Ana, que termina en la calle Postigo, en cuyo comienzo encontramos una pintoresca casa frente a la impresionante fachada de ladrillo, Casa de los Lizana, de las nuevas instalaciones de la facultad de económicas.En el año 2.010 el edificio fue restaurado siguiendo su distribución original, alrededor de dos patios en dos plantas y un pequeño sótano. Actualmente alberga las Concejalías de Desarrollo Económico, Empleo y Comercio de la ciudad.
Puerta de Madrid
En los límites de la ciudad antigua, a apenas cien metros de la calle Victoria, se abre una plazuela de planta triangular en el lugar donde antiguamente, se localizaba la puerta de la muralla que brindaba acceso a la ruta tradicional que une Alcalá con Madrid. La puerta quedó huérfana en el siglo XIX, cuando se decidió demoler la ruinosa y antigua muralla que para lo único que valía por aquel entonces era para dificultar el paso de personas y mercancías a la ciudad. Los restos que quedan de la muralla corresponden solamente al recinto del Palacio Arzobispal.Junto a la puerta de Madrid podemos observar la torre suroeste de la muralla superviviente; el conjunto contaba con veintidós torres, de las que aún se conservan dieciséis. Pasando por debajo del arco de la Puerta de Madrid, sigamos de frente. Encontraremos una zona de Parking (gratuito a nuestra derecha) llamado Pico del Obispo. Si continuamos recto, iremos dirección al Palacio Arzobispal.
Palacio Arzobispal
Alcalá de Henares, señorío de los poderosos Arzobispos de Toledo, comenzó a expandirse y en sus terrenos y se construyeron fortificaciones como el espléndido Palacio Arzobispal en el año 1.209, que serviría como residencia de Arzobispos y Reyes, y donde Cristóbal Colón mantuvo su primera audiencia con Isabel I de Castilla para viajar a las Indias atravesando el Atlántico. El Palacio vio nacer a la infanta Catalina de Aragón y al emperador Fernando de Alemania.A la derecha del palacio se abre la apacible plaza de las Bernardas en cuyo extremo norte se encuentra el Monasterio Cisterciense de San Bernardo, levantado en 1.617.Al lado del parque, encontraremos el Museo Arqueológico regional de Alcalá de Henares, está situado en el antiguo Colegio Convento de dominicos de la Madre de Dios, fundado en el siglo XVII (la entrada es gratuita):Museo Arqueológico RegionalPlaza de las Bernardas, s/n 91 879 66 66 www.madrid.org
En 1.694 era el Oratorio de San Felipe Neri, hoy el Colegio de Filipenses. A modo de curiosidad, éste fue el lugar de retiro de Don Miguel de Unamuno, ilustre defensor de Alcalá. Debió de leerse la biblioteca que se custodia tras estos muros y que contiene un valor incalculable.Como curiosidad hay una tienda de libros, dónde podréis encontrar auténticas obras de todos los tiempos y/o del cómic, desde el módico precio de 1 €uro. Hace tiempo, también compraban libros por una cantidad similar, por lo que quizás puedas sacar algún dinero extra con esos libros que ya has releído cientos de veces y que carecen de importancia para ti.Como se nos ha echado el tiempo encima, ¡tenemos hambre!, y nos encontraremos en esta misma calle, nuestra segundo encuentro con La Ruta de los Mesones. “La Casa Vieja” (el primero fue “Las Cuadras de Rocinante”), donde podremos degustar cocina castellana, con una fábrica de cerveza, su horno de leña… fue construida en el siglo XVI, en pleno Renacimiento. Las parrilladas y los asados en horno de leña, acompañados de un buen vino tinto harán las delicias de nuestros paladares más exigentes; que digo yo… que para eso estamos casi de vacaciones o… ¿qué es un día libre si no? Pues eso, nos metemos para adentro, pedimos la carta y comemos como Dios manda.Casa ViejaDirección: Calle San Felipe Neri, 7, 28801 Alcalá de Henares, MadridTeléfono:91 883 62 81Abierto de: 12:00–24:00Una vez que hemos tomado nuestro “chupito de hierbas” (que suele ser el que denominado que baja todo lo que nos hemos metido para el cuerpo) nos iremos dirección de nuevo a nuestro hotel, a descansar un poco que tenemos que reponer fuerzas para lo que nos espera al día siguiente: de cuándo data la ciudad, primeros asentamientos…