Hola, soy Abel de Mil Ideas, y este jueves vamos a Dinamarca, a conocer uno de los últimos restaurantes de lujo abiertos en la ciudad: Alchemist.
Todo el espacio, cavernoso, sofisticado y exótico, diseñado por el estudio Duncalf, ha sido creado con la idea de lograr una experiencia extraordinaria donde la estimulación visual y auditiva forman parte inherente de la carta.
Así pues, “la comida” empieza nada más entrar por una gran puerta de bronce tallado que conduce a una galería de arte que cada cierto tiempo estará exhibiendo el trabajo inmersivo de un artista determinado.
Tras este primer encuentro, se conduce a los comensales al área de bar, una zona sumamente sofisticada y lujosa para tomar el aperitivo y algún cóctel.
Hecha esta parada, los comensales vuelven a cambiar de zona para degustar los platos principales en una especie de auditorio con pantallas gigantes sobre sus cabezas que ofrecen una visión de 360 grados, y donde podrán ver impresionantes vistas del monte Fuji, nadar con medusas o disfrutar de auroras boreales, entre otras vistas, según la carta de temporada.
Terminados los platos principales, un ascensor lleva de nuevo a los comensales a otra sala, esta vez hasta el tercer y último espacio, donde se sirve el postre. Un espacio más acogedor y tranquilo, para terminar de degustar la carta.
Toda una experiencia de gastronomía holística que dura de 3 a 5 horas. Que lo disfrutéis.
Fotografía Claes Bech Poulsen
Diseño Studio Duncalf