Alejandro Fernández protagonizó un bochornoso momento cuando casi vomita a sus mariachis en el escenario, de la Feria de Puebla en México. El malestar se debió a un trago de tequila que alguien le acercó desde el público.
Todo marchaba con normalidad, hasta que uno de los asistentes le ofreció la bebida. El cantante, sin dudarlo, lo tomó y, minutos más tarde, comenzó a tener evidentes arcadas mientras intentaba continuar el show.
Seguidamente Fernández comienza a sentir náuseas, se limpia el sudor con su brazo, invita a sus seguidores a seguir cantando y se gira hacia donde están sus músicos cuando ya no puede disimular más.
El momento quedó registrado en los móviles de sus seguidores. Según medios locales, el intérprete de "Me dediqué a perderte" se vio obligado a abandonar unos minutos el escenario para vomitar y, cuando volvió, pidió disculpas diciendo que el tequila "estaba muy fuerte".
Pese a las críticas por su lamentable actuación, él prefirió tomárselo con humor. "¡Gracias Puebla por dos noches espectaculares! Ah, y la próxima vez que me den un tequila en el Palenque, ¡que sea Herradura!", bromeó .
No es el primer escándalo de la estrella de la música de 46 años. Uno de los últimos ocurrió en agosto pasado cuando se fue de fiesta a Las Vegas, y se mostró en evidente estado de ebriedad. "Estaba en Las Vegas en una despedida de soltero, no íbamos a estar tomando malteadas", respondió.
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