Sitio Web de la ImagenLETRINA DE CONVENTO
Al fondo del convento de las monjas
hay una pequeña letrina
con una puerta entreabierta y visitantes nocturnos.
Mientras una está adentro,
la otra aguarda su turno
con la nariz metida en un libro.
Y mientras la primera sale
arreglándose las ropas,
con la cara casi radiante,
la otra se acerca y se asoma,
espía por el oculto agujero
temblando de terror
de que eso que yace en el fondo
pueda brincarle en la cara
y dejarle una marca en la mejilla
con la forma de una diabólica cruz
Aleksandar Ristovic.
Traducción de Rafael Vargas.
Nota de David González: Este poema está en este libro de Charles Simic que estoy leyendo:

