Aunque invierno suele ser la temporada de catarros, durante el verano también hay una serie de factores que los propician. Y es que sería una pena que te coja un resfriado en plena época de vacaciones, así que es mejor tomar previsiones y estar al tanto de qué los ocasiona y cómo puedes prevenirlos.
Factores causales
Toda gripe tiene su raíz, y en verano, el principal motivo de su aparición es a causa de los cambios bruscos de temperatura. El clima de la calle es caliente y, al entrar a un lugar donde el aire acondicionado está muy frío, puede contribuir a disminuir las defensas del organismo y permitir que el virus ataque, lo que consecuentemente termina siendo un resfriado.
Igualmente hay otros factores que propician un contagio fácil, como por ejemplo: mantener una dieta pobre de nutrientes y vitaminas, no estar bien hidratado y tener bajas las defensas del organismo.
Identifica el resfriado
Los síntomas de la gripe son comunes en todas las temporadas del año, y constan de:
- Estornudos.
- Congestión nasal.
- Malestar de garganta.
- Tos.
- Dolor de cabeza.
- Fiebre.
Si el cuadro sintomático es muy fuerte o presenta dolores en otras zonas, es recomendable visitar al médico.
10 pasos para prevenirlo
Lastimosamente, no existe una manera de impedir que el virus de la gripe afecte al ser humano; sin embargo se pueden tener ciertos cuidados para evitar el contagio.
- Aumenta la ingesta de líquidos, ya que el sistema inmune funcionará correctamente y atacará cualquier amenaza. Procura no tomarlos muy fríos ni muy calientes.
- Usa moderadamente el aire acondicionado. Cuando lo enciendas, mantenlo a una temperatura intermedia entre 22 y 24°C.
- No grites ni es fuerces la voz para no resecar y lesionar la garganta.
- Evita los ambientes secos. Son propensos para que se incuben las bacterias que causan la gripe.
- Lávate las manos con frecuencia y utiliza gel antibacterial. Las manos son el principal factor de contagio.
- Ventila todas las habitaciones del hogar y, si es posible, de tu puesto de trabajo.
- Aléjate de lugares que estén rociados con químicos como insecticidas, productos de limpieza de fuerte olor, etcétera. Pueden irritarte la garganta.
- Si tu oficina es muy fría, cúbrete la garganta y la boca.
- Intenta no exponerte a cambios de temperatura muy bruscos. Si estás en un sitio muy frío trata de climatizarte antes de salir a la calle.
- Deja el cigarrillo.
(Fuente: SmartSalus Blog)