Algo más que una carrera.

El pasado lunes 17 hacía 50 años que una mujer completó una de las hazañas más valientes que se conocen, para su época.
Kathrine Switzer, fue  la primera mujer en cruzar la línea de meta de un Maratón de forma oficial. Quizá hoy en día puede resultar algo de lo más normal, pero recordemos que eran los 60 y por aquel entonces no se permitía que las mujeres participaran en carreras de largas distancias. Para poder inscribirse lo que hizo fue usar sus iniciales y de esa manera pudo correr la primera maratón, la de Boston. Kathrine portaba el dorsal 261. 
Tenía 20 años y simplemente quería correr, ponerse a prueba, retarse a sí misma como tantas otras personas, hombres y mujeres.
Durante el transcurso de la carrera el director del evento trató de expulsarla del
 recorrido mediante el uso de la fuerza; “Fuera de mi carrera, dame ese dorsal” -
le dijo-, y le agredió.
Pero muchos de sus compañeros la apoyaron y finalmente pudo llevar a cabo su reto. Gracias a esta acción se consiguió cambiar la legislación que impedía competir a las mujeres en este tipo de pruebas.
Kathrine no perdió su entereza y finalizó el maratón. Las imágenes de lo sucedido dieron la vuelta al mundo.
Posteriormente un grupo de mujeres junto a Kathrine Switzer trataron de convencer a la organización del Maratón de Boston que permitiera la participación de mujeres en el mismo. Lo consiguieron y al cabo de cinco años, en 1972 las mujeres ya podían inscribiré y participar en él.
 

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Este dorsal el número 261 que tanto ha significado para tantas mujeres hoy en día da nombre a una carrera y un movimiento, con los cuales se rinde homenaje a Katherine, y a todas las mujeres que en algún momento han sido capaces de romper barreras y cambiar nuestra sociedad. Puedes conocer más sobre el movimiento y sobre la carrera AQUÍ.
Espero que os haya gustado y que así conozcáis a una de las mujeres que cambiaron algo en la sociedad para que las mujeres de hoy podamos disfrutar lo.
Hasta otra!