
- MENSTRUACIONES MUY ABUNDANTES: frecuentemente en mujeres muy jóvenes, sobre todo si usan DIU. Muchas mejorarían su estado físico y anímico con una dieta rica en hierro.
- � DIVERSAS ENFERMEDADES: muchas pueden producir pequeñas hemorragias o una mala absorción de hierro y causar déficits serios en este mineral. Es el caso de gastritis, hemorroides, enfermedades hemáticas, alteraciones en la absorción del hierro, consumo crónico de ciertos medicamentos, inflamaciones intestinales…
- � DIETAS DESEQUILIBRADAS: resulta frecuente que las personas que comen de forma desordenada, con abundancia de precocinados o comida rápida, tengan carencias de hierro.
- � DIETAS VEGETARIANAS ESTRICTAS: a menudo las personas que no incluyen carne, pescado ni huevos en su dieta, pueden tener carencias. No olvidemos que el hierro de los vegetales se aprovecha poco.