Debo admitirlo. En estos últimos años me he pasado más tiempo viendo videos que leyendo libros. Y es que cada vez que intento avanzar con una lectura, siento mucho agotamiento. Puede que necesite lentes o, quizás, deba adquirir algunos hábitos de lectura que los he perdido con el tiempo.
Aún así, hago todo lo posible por adquirir un hábito de lectura. Ya que no me puedo despegar del internet, por lo menos intento leer un artículo de mi interés. Y de a poco vuelco esa lectura en algún PDF o cuento, para trasladar mis lecturas en un libro impreso.
Y en base a lo que hago, les daré algunos consejos por si quieran adquirir el hábito de la lectura. No hay trucos ni nada, solo explicaré lo que hago y pienso que estos consejos podrían decírselos a sus hijos adolescentes para que se despeguen un poco de los videojuegos o el internet.
Si tienes hijos chiquitos, puedes comenzar con leerles un cuento antes de dormir. A los niños les encantan los libros ilustrados. Puede ser un comic también. Y cuando éstos sepan leer, regálales un libro o permíteles usar esa aplicación de tu celular donde puedan leer cuentos o novelas aptos para su edad.
Cuando tus hijos lleguen a la adolescencia, comienza con darles novelas de fantasía o acción. Puede ser Harry Potte (¿Por qué no? Yo crecí con esa saga y agradezco eso) o algunos de los libros que he recomendado en esta entrada.
Si eres un adolescente o un joven adulto, puedes comenzar leyendo sagas juveniles. Si te gustan series como “Juego de tronos” o películas como “El señor de los anillos”, intenta leer sus libros. Por cierto, muchas de las series o películas que ves y te gustan están basadas en libros. Las que leí y recomiendo son “Entrevista con el vampiro” de Anne Rice, “Orgullo y prejuicio” de Jane Austen, “Sherlock Holmes” de Conan Doyle, “Los juegos del hambre” de Suzanne Collins, “La sirenita” de Hans Christian Andersen, “El amor en los tiempos del cólera” de Gabriel García Marquez, “Yo, robot” de Isaac Asimov, “El nombre de la rosa” de Umberto Eco y “La casa de los espíritus” de Isabel Allende. Todos esos libros fueron adaptados para películas y muchos no saben que en realidad fueron inspirados en libros y cambiados muchas escenas.
De a poco comienza leyendo algún clásico. Aunque sea uno. Puede ser algún libro de Julio Verne o de Conan Doyle. Los ingleses, por lo general, poseen una forma de escribir clara y directa, por eso a muchos les gustan la literatura inglesa de antaño como “La vuelta al mundo en 80 días” o incluso “El retrato de Dorian Gray”, escrito por Oscar Wilde.
Si eres de Paraguay, intenta leer algún autor paraguayo. Recomiendo los cuentos de Augusto Roa Bastos, los cuales hablan sobre la condición humana y reflejan bastante sobre el pensamiento del paraguayo promedio. Otros autores nacionales que también puedes leer son Gabriel Casaccia, Josefina Plá y Rafael Barret (sé que estos dos últimos son españoles, pero conocieron muy bien el país y por eso los considero autores paraguayos por excelencia), entre otros.
Más de una vez he escuchado que me decían “no tengo tiempo” cuando les preguntaba a la gente el porqué no leían. Y sin embargo les veo con la mirada en el celular todo el tiempo. Ese “no tengo tiempo” fácilmente puede eliminarse con tan solo despegar los ojos de la pantalla del celular y dirigirla a un libro. Prueba con dedicarle aunque sea unos diez o quince minutos de lectura. O intenta establecer una meta: al menos diez o quince páginas por día. Ese tiempo que dedicas a revisar tus redes sociales o ver videos, puedes reemplazarlo con una buena lectura.
Y si realmente eres una persona muy ocupada, prueba con leer por las noches, antes de dormir. Se ha demostrado que leer por las noches mejora la concentración, reduce el estrés y combate el insomnio causado por el brillo de pantallas de un computador.
Otro punto muy importante: lee lo que te gusta, lo que te atrae. Sé que muchos te lanzarán una lista de libros que, con tan solo darle una miradita, te matarán de aburrimiento. Yo digo que lo mejor es leer lo que te apasiona o te atrae de momento. Y de vez en cuando prueba leer también otras cosas para así fortalecer la mente y tener un buen tema de conversación.
La lectura estimula el intercambio de información, retarda la aparición de la demencia, reduce la depresión y fortalece la concentración y la percepción.
Si te interesa saber sobre series animes inspirados en libros o mitologías, te recomiendo este artículo escrito meses atrás en este blog.
Y si deseas profundizar sobre el arte de la lectura y escritura, te recomiendo esta serie de cursos que publiqué en mi blog hace meses atrás.
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