La cúrcuma es la reina de todas las especias. Los expertos científicos han llegado a descubrir 600 usos y aplicaciones preventivas y terapéuticas en esta maravilla natural. Sin duda es un aliado fantástico para nuestra salud.
Los principios activos de la cúrcuma, los curcuminoides; en especial la curcumina, son enormemente eficaces, tanto o más que los medicamentos que producen los laboratorios farmacéuticos pero sin efectos secundarios e indeseables sobre el organismo.
Múltiples usos y aplicaciones.
Especialmente eficaz en casos de arterioesclerosis, diabetes, riesgo de trombosis, síndromes depresivos y de ansiedad, inflamaciones y altamente eficaz en la prevención del cáncer.
Pero sus propiedades van más allá:
- La cúrcuma actúa como un potente antiinflamatorio. (La inflamación crónica es un factor desencadentante de numerosas enfermedades crónicas. La curcumina se ha demostrado altamente eficaz ya que ejerce influencia sobre más de 700 genes, algo que explica su poder benefactor.)
- Ayuda a curar inflamaciones con la artritis y la pancreatitis.
- Antióxidante.
- Disminuye los dolores reumáticos y menstruales.
- Estimulante digestivo.
- Antimicrobiano para curar las heridas, úlceras y eccema.
La curcumina reduce la actividad de ciertas enzimas, se observa cómo se produce una reducción de citokymas inflamatorias, de interleucinas y de las proteínas quimiotácticas.
Pero la cúrcuma es mucho más que un antiinflamatorio natural sin efectos indeseables, la cúrcuma actúa también como un potente anticancerígeno ya que, según un estudio de 2008, se observa cómo la cúrcuma inhibe la mitad de la motilidad (capacidad de desplazarse) de las células del cáncer de pecho y su propagación.
En 2009, un estudio publicado en la revista científica "Molecular Pharmacology" reveló que la curcumina inhibe el crecimiento de las células cancerígenas del páncreas y aumenta la sensibilidad de las células a la quimioterapia.
También se demostró que la cúrcuma favorece la muerte celular de las células del cáncer de pulmón.
In la India, donde la cúrcuma es muy popular y regularmente consumida, la frecuencia de cánceres que en Europa están muy extendidos (colon, pecho, próstata y pulmón) es 10 veces inferior.
En otro experimento científico se llevó a cabo una comparación entre el ibuprofeno y la cúrcuma sobre 107 pacientes que sufrían artrosis con un umbral de dolor igual o superior a 5. Unos tomaron 2 g de cúrcuma y los otros 800 mg de ibuprofeno al día durante 6 semanas.
La mejoría experimentada por los pacientes, especialmente caminando, era prácticamente la misma.
Por lo tanto se puede decir que la cúrcuma iguala los efectos del ibuprofeno pero claro, sin los nefastos efectos indeseables del medicamento (úlceras de estómago).
La cúrcuma es un remedio muy eficaz contra el síndrome del colon irritable.
Contra la diabetes.
En India la cúrcuma se emplea desde hace mucho para curar la diabetes. La cúrcuma estimula la secreción de insulina en el páncreas e incluso ayuda a prevenir eficazmente la diabetes tipo 2 en aquellas personas propensas (obesidad y sobrepeso).
¿Cómo se toma?
La cúrcuma se toma en polvo de rizoma seco. Se aconseja tomar entre una media cucharilla de café a una entera por día, aproximadamente de 60 mg a 200 mg de curcuminoides.
Una forma sencilla y útil de integrar la cúrcuma en la alimentación es comprarla en polvo y añadirla como su fuera sal en los platos.
Para que el organismo la asimile mejor, se aconseja tomarla con lípidos (grasas, aceites) o asociarla a pimienta negra, lo que aumenta enormemente la absorción intestinal de los curcuminoides.
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