Revista Cine
Director: Ridley Scott
Dios... con estos dolores de cabeza no se puede ver ni leer nada, apenas comentar algo. No obstante, haremos el esfuerzo. Como dije hace un par de días, he andado flojo homenajeando a aquellas personalidades del cine que han partido a lo largo de este año, así que me propuse hacerlo de una buena vez. Ahora es el turno de John Hurt y para ello comentaremos "Alien", una de esas deudas cinemetográficas que ya me estaban atormentando más de lo necesario. A todo esto, me sorprende que por acá no hayan más películas de Ridley Scott comentadas, pero como se dice por ahí, tiempo al tiempo...
La verdad es que nunca he hablado de "Alien" con nadie, a excepción de cuando, hace unos cinco años, le pregunté a un compañero de universidad que acababa de conocer si la había visto, a lo que me respondió que sí pero que no le pareció tan trascendental, lo que no significa necesariamente que no le haya gustado, a fin de cuentas quizás llegó con las expectativas muy altas. Afortunadamente yo soy bastante inmune al ahora llamado hype; no es que no me decepcione de algunas películas, sólo que usualmente mis razones van por otros lados más allá del ruido mediático y de las expectativas generadas por terceros. Como sea, estoy divagando y rellenando, que con esta cabeza no puedo pensar muy bien. Lo bueno es que cuando vi "Alien", hace un par de días, estaba en plenitud de mis facultades y, si mal no recuerdo, la calle se mantuvo en un inusitado y respetuoso silencio. (Ojalá pudiera tener una sala de cine propia, como esa gente que aparece en "Cribs", la serie de MTV en donde los ricos nos muestran todos los rincones de sus mansiones). A estas alturas del partido ya todos saben de qué trata "Alien" y mi intención no es venir a dar sesudos análisis al respecto, tan sólo voy a constatar, más o menos, por qué me gustó esta película, de sencillo planteamiento pero de excelente realización. La historia comienza cuando los tripulantes de la nave Nostromo despiertan y, por motivos contractuales, deben ir a un planeta cercano a verificar quién o qué emite señales de... ¿de vida? El asunto es que algo aparentemente común y corriente se transforma en una verdadera pesadilla cuando la tripulación se da cuenta de que son acechados por una violenta criatura alienígena que, para empeorar las cosas, pasa la mayor parte del tiempo escondida... pero no por cobardía, sino que lista para atacar. De manera directa y contundente, "Alien" nos adentra de lleno en este frenesí de locura, incertidumbre, inquietud, horror y cuánta cosa más, amén del refrescante, contundente y consistente guión de Dan O'Bannon y de la sensacional puesta en escena de Ridley Scott, tan pulcra como brutal (como la escena de la decapitación... por dios qué cosa más genial). Qué decir de la impecable y deslumbrante ambientación, con esa nave, ese planeta, esa otra nave, el alien, la explosión estomacal... "Alien" dura casi dos horas y uno se pasa todo ese tiempo pegado a la pantalla, y cómo no si tiene de todo: gore, suspenso, misterio, sentido del humor (qué personaje el de Harry Dean Stanton, no me digan que no)... Vale la pena señalar que el motor narrativo de "Alien", así como su pilar fundamental, no es la acción sino que el certero tratamiento del terror, del desconocimiento, que nos mantiene en vilo tanto en las escenas más "calmadamente" tensas (suspenso puro y duro) como en las contadas pero memorables y apabullantes explosiones de sangre y violencia, todo lo cual surge por la indefensión de la tripulación, de la sensación de total exposición ante un enemigo que aparentemente te tiene en la palma de su mano y que virtualmente no puede ser engañado ni sorprendido. Es que así parte todo: los toman desprevenidos, lo único que pueden hacer es retrasar lo inevitable...
Gran película, sí señor. No estaría mal ver "Aliens", en donde aparece Bill Paxton. ¿Qué dicen?