El director Fede Álvarez lleva al pie de la letra la premisa de Alien el Octavo Pasajero. Se trata de terror gótico en el espacio tan preciso en su puesta en escena, en su diseño de producción y en lo claustrofóbica y aterradora que resulta esta nave como su antecesora la Nostromo, de la que vemos fragmentos flotando en el espacio.Es cuidadosa y respetuosa en los detalles aunque es genial el giro que propone en que esta vez los tripulantes ingresan al lugar infestado de xenomorfos sin que hayan recibido señal alguna de auxilio o cosa parecida. Esta vez se trata de la supervivencia básica y el sueño de un planeta prometido en el que se puede ver la luz del sol, pues en donde viven, una colonia de trabajo y explotación es oscuro y desolador. La protagonista, Rain Carradine (Cailee Spaeny), una agricultora que vive en la colonia al igual que los demás, se deja convencer de que el único camino es huir de ese lugar de explotación y esclavitud. Lo hace junto con su hermano Andy (David Jonsson), un androide cuyo objetivo es hacer feliz a su hermana y un grupo de jóvenes que se aventuran con la promesa de una vida mejor.Sin duda, la protagonista femenina da la talla de heroína tan cercana a la Teniente Ellen Ripley, un acierto en esta entrega. Es tan decidida y valiente y lo transmite de principio a fin. Gran actuación perdurable seguramente en el tiempo. No se queda atrás su hermano que resulta el personaje más inquietante con sus cambios y acciones que te ponen en duda todo el tiempo. Los demás lo hacen con decoro (Isabella Merced, Archie Renaux, Spike Fearn y Aileen Wu) y es un grupo casi tan interesante como los tripulantes de la nave Nostromo. Hasta aquí vamos bien.
Algo que resta fuerza a Alien Romulus son las apariciones de los xenomorfos, claro, se puede tener el beneficio de la duda puesto que en el Octavo Pasajero el factor sorpresa que ofrece la aparición a cuenta gotas del villano, es un punto a favor de la historia. Sin embargo, no hay solo momento en el que sus salidas sean brutales e icónicas, casi que forman parte del decorado o son simplemente parte de la acción y del hilo de la historia.
Igualmente no se que tan necesario era sacar a Ash de manera virtual, claro, de seguro se trata de seguir el hilo conductor de su antecesora pero estos personajes de inteligencia artificial resultan poco creíbles, creo se hubiera resolver de otra manera pero ya eso fue lo que fue.
De todos modos, Alien Romulus es de gran factura y vale mucho la pena verla para retomar una de las mejores sagas de cine de terror y ciencia ficción. La música de Benjamin Wallfisch también es muy buena y ayuda a la atmósfera tan lograda. Gracias por darnos esta pequeña joya del celuloide.