El plátano (Musa paradisiaca) es una fruta tropical perteneciente a la familia de las musáceas. De origen asiático, fruta típica en España de la región de las islas Canarias, llegó a las islas en el siglo XV y llevadas desde allí a América en el siglo XVI.
Nos encontramos con multitud de especies de esta fruta Gros Michel, Zelig, Lacatan, Dominico, etc. Podemos destacar el plátano macho, utilizado para hacer harina para la elaboración de pan o el plátano de Canarias.
El plátano se caracteriza por su alto contenido energético. Es una de las frutas con mayor perfil lipídico y destaca su contenido en hidratos de carbono.En problemas digestivos es un alimento muy recomendable cuando está ya maduro, ya que los hidratos de carbono se han transformado en azúcares simples facilitando su digestión y absorción.
Por su contenido en fibra, inulina y fructoligosacáridos mejoran el tránsito intestinal previniendo problemas de estreñimiento o diarrea. Además, la inulina presenta propiedades beneficiosas ante problemáticas como cardiopatías y diabetes tipo II ya que estimula el sistema inmune, mejora la biodisponibilidad de minerales y el metabolismo de los lípidos.
Su aporte vitamínico es importante; podemos destacar el ácido fólico, importante para el sistema inmunológico y para el correcto desarrollo del organismo. Sin embargo, el plátano se caracteriza por su aporte mineral destacando su contenido en magnesio y potasio.El magnesio, que se encuentra en mayor proporción que el potasio, ayuda en multitud de procesos desde formar parte de los huesos hasta intervenir en las funciones del sistema nervioso.
El potasioayuda a prevenir calambres lo que, combinado con la energía que proporciona, lo convierte en una fruta ideal durante actividades deportivas para recuperarse tras estas.
Es una de las frutas preferidas por los niños, ofrece múltiples formas de presentación y garantizan unas meriendas muy divertidas para ellos.
A pesar de que la mayoría de las veces se elimine de la dieta de los diabéticos, lo cierto es que el plátano es un alimento muy recomendable para estas personas ya que es una fruta de bajo índice glucémico lo que favorece una entrada de glucosa en sangre pausada ayudando a evitar esos picos insulínicos característicos de los azúcares simples, otros que pueden verse beneficiados son hipertensos; sin embargo, aquellos que padecen de problemas renales o insuficiencia renal deberían evitar su consumo por su contenido en potasio.Y ahora, a la cocina para preparar... “Naranjas al estilo Nutrición a las 6”.
- 3 naranjas de mesa
- 1 naranja de zumo
- 2 plátanos medianos
- Fresas
- Azúcar
PreparaciónPelamos y cortamos en rodajas las naranjas, y las dispondremos en una fuente ancha no muy plana. A continuación, pelamos los plátanos y los cortamos también en rodajas, poniéndolos encima de las naranjas.Lavamos bien las fresas, cortamos las puntas y las pondremos encima, a su vez, de los plátanos.
Espolvoreamos un poco de azúcar encima de las rodajas y a continuación, echaremos el zumo de la naranja.
Para finalizar, lo metemos en la nevera unas horitas para que cuando lo vayamos a consumir este bien fresquito y refrescante.
Esperamos que esta receta os haya gustado, a pesar de su sencillez es una receta muy divertida que, por sus múltiples colores inspira para comer. Por supuesto, gracias a la naranja y fresas este plato nos va aportar gran cantidad de vitamina C.
Un saludo. Disfrutar del fin de semana.
Realizado por Tamara Valencia Dueñas y Cristina Vallespín Escalada.
FuentesFundación Española de Nutrición (FEN)Consumer eroski.Botanical on-line