¡Hola corajud@! Hoy vamos a hablar de los alimentos prohibidos para hipotiroidismo de Hashimoto, un tema que he visto en numerosas ocasiones en el grupo de “Vivir y Crecer con TDPM” (donde compartimos nuestra experiencia viviendo con este trastorno). Resulta que varias de nuestras compañeras valientes han mencionado que, además del Trastorno Disfórico Premenstrual (TDPM), lidian con la enfermedad de Hashimoto.
Ya sabéis que no pierdo oportunidad de investigar todo lo que pueda hacernos la vida más llevadera, así que hoy toca ver qué alimentos son prohibidos para esta condición y cuáles podemos acoger con los brazos abiertos (o con la boca bien abierta, mejor dicho).
¿Qué es el hipotiroidismo de Hashimoto?
Para quienes no estén tan al día en “enfermedades con nombres chulos” como Hashimoto, te cuento: esta joyita es una enfermedad autoinmune que ataca a la tiroides.
La tiroides acaba fatigada y produciendo menos hormonas, y esto es básicamente lo que se conoce como hipotiroidismo de Hashimoto. Entre los síntomas, se pueden ver ganancia de peso injusta, cansancio extremo, piel seca, depresión, problemas menstruales y, atención, niebla mental.
Sí, esa bruma en el cerebro que hace que te olvides dónde dejaste las llaves o qué día era hoy.
¿Por qué se produce?
Se produce por un desajuste del sistema inmunitario que, en lugar de ser nuestro fiel guardaespaldas, se vuelve rebelde y empieza a atacar a la tiroides.
Aunque no hay una causa única y exacta, se ha visto que ciertos factores genéticos, la presencia de otras enfermedades autoinmunes, o incluso periodos de mucho estrés (¡Hola, TDPM!) pueden estar relacionados.
Relación entre Hipotiroidismo de Hashimoto y TDPM
Si sufres TDPM, probablemente estés ya bastante familiarizada con el juego hormonal mensual, y te puede interesar saber que hay una conexión muy potente entre la tiroides y los ciclos menstruales.
La tiroides y los ovarios están altamente conectados, así que cuando una empieza a fallar, la otra le sigue la corriente. Hashimoto puede intensificar los síntomas de TDPM (más cansancio, más niebla mental, ánimo por los suelos…), y al revés, el TDPM con sus subidas y bajadas hormonales puede empeorar el Hashimoto. Es como un bucle infinito de ¡ayuda! hormonal.
Alimentos prohibidos para hipotiroidismo de Hashimoto
Aquí la cosa se pone seria, pero con un toque esperanzador: controlar lo que comes puede ayudar a disminuir los síntomas y devolver un poco de paz a tu tiroides.
Te dejo una lista de alimentos que mejor es mantener fuera del carrito de la compra si tienes Hashimoto:
- Gluten: Parece que hay una relación entre el Hashimoto y la sensibilidad al gluten, ya que el gluten puede desencadenar más respuestas autoinmunes. Así que, adiós panes y pastas convencionales.
- Lácteos: Son un posible irritante para la tiroides y también pueden inflamar el intestino, empeorando el estado general. ¡A practicar el arte del latte con leche de avena!
- Soja: Aunque nos encanta el tofu en nuestras ensaladas, la soja contiene compuestos que pueden interferir con la función tiroidea.
- Crucíferas crudas: Coles de Bruselas, col rizada, brócoli crudo… A nivel cocido está bien, pero crudas pueden interferir con la producción de hormonas tiroideas.
- Azúcar refinada: Ya sabemos que el azúcar es el diablillo de muchas condiciones, pero en Hashimoto, este demonio puede causar estragos a nivel de inflamación.
Alimentos que sí son bienvenidos
¡No todo está perdido, tranquil@! También hay alimentos que pueden ser tus aliados en esta lucha contra Hashimoto y que, de paso, pueden echar una manita con los altibajos del TDPM. Aquí van unos cuantos:
- Alimentos ricos en selenio: Como nueces de Brasil, pescado y huevos. El selenio es clave para la función tiroidea, así que es tu amig@ aquí.
- Alimentos ricos en omega-3: Como salmón, chía y nueces. Estos ayudan a reducir la inflamación y equilibrar el humor, lo cual se agradece en los días más intensos del TDPM.
- Alimentos antiinflamatorios: Frutas como arándanos, verduras de hoja verde, cúrcuma… Básicamente, lo que en cualquier dieta antiinflamatoria te suelen recomendar.
- Alimentos fermentados: Como el kimchi, el chucrut y el yogur sin lactosa o yogur de cabra (con menos lactosa), que pueden mejorar tu microbiota intestinal. Recuerda que si el intestino está contento, ¡todo está más en calma!
- Alimentos ricos en vitamina D: Como champiñones y pescado graso, ya que un déficit de vitamina D se ha relacionado con enfermedades autoinmunes.
Conclusión
Si te reconoces en este cuadro de Hashimoto + TDPM, no estás sol@. La alimentación puede ser un punto clave para gestionar ambos desajustes hormonales y mejorar tu calidad de vida.
Ya sabes, elige tus alimentos sabiamente, cuida tu tiroides y sigue haciéndole frente a esas subidas y bajadas hormonales. ¡Te prometo que este esfuerzo te va a sumar puntos de energía y salud mental!
Recuerda que ningún plan alimenticio debe hacerse sin consultar antes con un especialista, especialmente cuando hablamos de condiciones tan complejas como esta.
¡Que tu día esté lleno de comidas saludables y de ánimos para afrontar cualquier montaña rusa hormonal!