A estas alturas de la vida, probablemente todos ya sepamos que una alimentación saludable es súper importante para tener una mejor calidad y esperanza de vida, pero, además de cuidar nuestro organismo desde el interior, nuestra alimentación también puede influir en otros factores, como en nuestra silueta, influyendo en nuestro peso, o también en nuestro rostro, haciendo que pierda firmeza y aparezcan más arrugas. Y hoy os lo quiero contar de la mano del Dr. Perricone, considerado uno de los principales dermatólogos a nivel mundial y cuya firma propia de cosmética ya sabéis que me encanta por su investigación y eficacia.
Según comenta el Dr. Perricone, hay una serie de alimentos que forman parte de nuestra alimentación habitual diaria que son famosos por aumentar el peso, como ocurre las cantidades excesivas de hidratos de carbono. Ahora bien, ¿y si hubiera aún más motivos para evitarlos? Los expertos explican que muchos de estos alimentos habituales, además, pueden acelerar la velocidad a la que se envejece. La clave está en evitar los alimentos que supongan un pico glucémico al digerirlos: "Por ejemplo, los alimentos ricos en azúcares. El azúcar es responsable principal de la glicación, proceso por el que las moléculas de los azúcares se adhieren a las fibras de colágeno y provoca que pierdan elasticidad. Es como si el colágeno se caramelizara o cristalizara, partiéndose. El azúcar, además, ataca también a los componentes de la membrana plástica celular, favoreciendo el envejecimiento de las células".
PRODUCTOS QUE EVITAR EN LA LISTA DE LA COMPRA PARA CUIDAR NUESTRO ROSTRO
Pastas y arroces: Su alto índice glucémico es un gran responsable de la glicación. Lo mismo ocurre con otros como el pan blanco o los copos de maíz.
Zumos: En una fruta al natural, aunque pueda contener mucho azúcar, ésta se metaboliza bien por el alto contenido en fibra. En cambio, en un zumo se ingiere el jugo, pero no la fibra. Esto reduce la correcta metabolización y produce picos de glicación.
Café: Aunque parte esencial del desayuno diario, se ha demostrado que su ingesta eleva los niveles de cortisol, la 'hormona del estrés', que produce un incremento de la insulina, una mayor inflamación celular y una alteración de la barrera cutánea que, como consecuencia, puede provocar la hipersensibilidad o procesos de imperfecciones. Refrescos light y otras bebidas edulcoradas: Poseen un alto contenido en químicos y edulcorantes que aumentan el riesgo de enfermedades cardiovasculares, favoreciendo la absorción de grasas y dificultando una correcta digestión y procesamiento de los nutrientes.
Alcohol: Los metabolitos del alcohol, unas moléculas conocidas como aldehídos, dañan la membrana plasmática, produciendo una reacción inflamatoria en las células. El único alcohol que se cae de la lista es el vino, y en contadas ocasiones. Esto obedece a que contiene polifenoles, grandes antioxidantes que protegen el organismo.
SORPRESA: ¡SI AL CHOCOLATE!
¡Sí, el chocolate es bueno para frenar el paso de los años! Eso sí, en pequeñas dosis, sin leche y sin azúcares añadidos. Cuando tomamos chocolate lo más puro posible, ejerce como potente antioxidante, evitando el ataque de los radicales libres y, gracias a su alto contenido en magnesio, regula los niveles de azúcar, ayuda a fijar el calcio, controla la flora intestinal y protege el sistema cardiovascular.
Ahora que ya sabes que todos estos alimentos pueden incidir en el envejecimiento prematuro de la piel, ¡toma nota e intenta reducirlos al máximo posible si quieres mantenerte mucho más joven con el paso de los años!