El dolor es un síntoma de reacción natural que inicialmente tiene la función de dar la señal de alerta al cuerpo. No obstante, con el paso del tiempo puede convertirse en un problema crónico.
Los siguientes alimentos y hierbas varias supondrán un alivio contra el dolor y mejorarán tu calidad de vida.
Aceitunas
Tanto la aceituna como el aceite de oliva reducen el dolor causado por las inflamaciones, especialmente si vienen de trastornos alérgicos y/o enfermedades auto-inmunes, por ejemplo la artritis.
Jengibre y ulmaria
En forma de tisana, estas dos hierbas mezcladas en partes iguales y diluidas en agua calman el dolor de estómago y el dolor de vientre. No recomendado en estados de gestación.
Valeriana
La típica valeriana “de toda la vida”, además de relajante, contiene una interesante capacidad sedante, que puede venir muy bien en casos de espasmos musculares en la espalda.
Lechuga
En caso de que el dolor no te deje descansar durante la noche, una ensalada donde prime la lechuga será el mejor y sencillo remedio para conseguir un sueño reconfortante.
Miel
El dulce preferido de las abejas también nos puede echar una mano en estos casos, especialmente si sufrimos de artritis, reúma, dolor de garganta o depresión, está última vinculada muchas veces a alguna dolencia crónica.
Chile
Cualquier salsa elaborada a partir de chile actuará como analgésico natural, por su contenido en capsaicina. En caso de aplicación externa, se debe utilizar aceite de chile para masajear la zona dolorida.
Matricaria
Esta hierba también nos ayudará, sobre todo en casos de dolor de cabeza. Se tomará en infusión, mezclando dos cucharadas de la hierba original por cada vaso de agua, o tomado en cápsulas siguiendo las indicaciones del fabricante.
Amapola
Sus efectos analgésicos no son demasiado fuertes, pero resultan útiles en dolencias relacionadas con el estrés así como la tensión nerviosa.