All we want for Xmas is… you

Todos los años nos pasa igual, diciembre es ese mes que parece que tiene 31 días pero no, no puede tenerlos porque se te pasa en un suspiro; te despistas un segundo y en cuanto te das cuenta, ya está todo el mundo sentado en la mesa, esperando que llegues tú, con los turrones colocados y las lucecitas del árbol en modo navidad-navidad. Y se acaba el año.

Un año que en nuestro caso, ha sido intenso a rabiar, han pasado muchas cosas y casi todas buenas…

Este ha sido el año en el que un mail de la editorial Planeta nos cambió la cara al leerlo y un poquito la vida. Gracias infinitas, por elegirnos, por ofrecernos la oportunidad de vivir algo que no sabemos si vamos a poder volver a vivir en nuestra vida, algo que ha sido BRUTAL. Brindamos una y mil veces por las 3 ediciones de un libro que hicimos con todo nuestro cariño y con la mejor compañia del mundo; nuestros diseñadores, amigos fotógrafos y nuestros cuentinovios.

Este ha sido un año en el que sin haberlo planificado, ha llegado un miembro más a nuestra pequeña cuentifamilia  Crecer da miedo, vértigo, te produce un curioso cosquilleo en la tripa pero te llena de ILUSIÓN. Abrir la persiana de la oficina de Mallorca ha sido mucho más que ese gesto, ha significado abrir una nueva etapa.

Este año hemos podido hacer bodas de las que nos gustan, hemos conocido a gente muy interesante y hemos disfrutado de los amigos que llevan ya tiempo con nosotros. Hemos viajado, (hasta hemos tenido vacaciones, YI-HA!!!), nos hemos enfrentado a nuevos retos y hemos escrito nuevas historias. Nos hemos reído, hemos llorado, nos hemos equivocado y hemos vuelto a empezar, como si no supiésemos nada y todo hubiese que volver a aprenderlo. Hemos redescubierto una vez y otra más que este es el mejor trabajo que podemos tener, que muchas veces no es un trabajo, si no un lujo, porque nos hace felices y nos permite dedicarnos a lo que realmente nos gusta. Y sentir esa pasión nos mantiene muy vivos.

Hemos pagado facturas, hemos corrido para llegar a todo y hemos caído rotos en la cama muchos días. Hemos brindado con vino y hemos comido y cenado juntos hablando de qué somos, qué hacemos y qué queremos para nuestro futuro; no hemos arreglado el mundo pero nos ha dolido la tripa de reirnos. Hemos metido la pata y hemos dado en el clavo. Hemos hecho regalos y hemos abierto el lazo de otros. Hemos echado de menos (mucho) a los que ya tenemos con nosotros. Nos hemos cambiado de oficina, hemos pintado paredes, hemos cargado cajas y las hemos descargado. Hemos dejado atrás algunas cosas para que llegasen otras nuevas. Muchas personitas han hecho que nuestras cuentas de las redes sociales tengan cifras que nos marean de la emoción, cada like y cada comentario nos ha arrancado una sonrisa, y hemos flipado mucho, mucho, mucho con esto, tanto que ya no sabemos cómo daros las gracias.

Ha sido un gran año, sería injusto decir otra cosa. Por todo lo que os hemos contado antes pero sobre porque estamos aquí, porque seguimos llenos de energía, ganas e ideas. Porque queremos seguir haciendo bodas a nuestra manera, que es la vuestra. Y porque, leñe, que somos muy FELICES, oiga.

Y solo hay un deseo para este nuevo año: Seguir CONTANDO CONTIGO. Contigo que nos lees ahora mismo, y que aunque no digas nada, estás un día más aquí. Contigo que crees en nosotros, que nos animas, que valoras lo que hacemos y disfrutas de Bodas de Cuento tanto como nosotros, que nos das fuerza y haces que nuestro trabajo merezca MUCHO la pena. Ojalá Papá Noel te meta en un saco de arpillera y te deje junto a nuestro abeto porque todo lo que queremos para Navidad eres TÚ.

Los cuentis te mandamos un beso GIGANTE y un bolazo de nieve en medio de una guerra de bolas. Que la Navidad te traiga muchas risas y muchos besos bajo el muérdago. Chín-chín!