Alma inmortal ~ Dianna M. Marquès

 

 

  
► Título: Alma inmortal
► Autora: Dianna M. Marquès
► Serie: Saga del Escarabajo #1 (de 3)
► Publicación: Diciembre 2009
► Editorial: Auto-publicación
► Páginas: 493
► Precio: 18 €

¿Y si tu mundo no fuera sólo tuyo?

Kate, una chica corriente de Nueva York, tras una aventura en Venecia con sus amigas y un suceso inesperado, tendrá que abandonar su vida, tal y como la conocía hasta aquel instante, y enfrentarse al secreto mejor guardado de la historia. Así, se introducirá en un nuevo mundo, que ha evolucionado a la par que la sociedad en la que vivimos y cuyos orígenes se remontan a la prehistoria, pero que siempre se ha mantenido oculto a los ojos de los mortales.

¿Podrás vivir sin saber cuál es el secreto?

Alma Inmortal abre La Saga del Escarabajo con una historia que podría haber dado algo más de si pero que no me ha disgustado y que creo que irá a mejor.

Kate es una joven neoyorquina que, junto a dos amigas, viaja a Venecia con motivo de la despedida de soltera de una de ellas. Y no sólo queda deslumbrada por la belleza de la ciudad italiana, sino que también lo hace por la de cierto italiano gondolero, Enzo. Sonrisas, paseo en góndola, miraditas cada dos por tres, invitación a una fiesta,… y un regalito inesperado: cuando llega a Nueva York, Kate descubre que está embarazada.

Cuando llama a Enzo para que esté al corriente de la situación, él reacciona de una forma un tanto extraña y al día siguiente se planta en NY intentando convencerla de que aborte con la excusa de una enfermedad hereditaria. Kate se niega. Enzo se rinde. Kate firma un documento en el que renuncia a exigirle cualquier responsabilidad sobre el niño. Las cosas cambian y se vuelven más complicadas de lo que parecían en un principio: Kate descubre un secreto que cambiará su vida. VAMPIROS.

El niño que lleva en su vientre es un dhaphiro (mitad humano/mitad vampiro), y Kate se ve obligada a abandonar su vida tal y como la conoce y a mudarse a Venecia. Enzo la acoge en su casa por obligación, pero pasará de ella, así que olvidad cualquier atisbo de amor o cariño. Enzo es terriblemente malo, pero, por suerte, nuestra protagonista contará con Galatea, la hermana del padre/donante-de-esperma/gilipollas de Enzo.

La narración y el ritmo de la historia, pese a no ser nada del otro mundo, están bien, aunque varias escenas pecan de lentas o demasiado rápidas y le quitan dinamismo al libro. Un libro normalito como tantos otros al que le sobran algunas páginas y cuyos personajes necesitarían más consistencia.

El mundo vampírico que ha creado la autora es distinto a muchos otros que ya hemos visto, y hay que reconocerle el mérito en ello a Dianna, pues los vampiros están muy trillados ya. La primera gran parte del libro se lee con rapidez pero es algo monótona, sin revelaciones que la hagan destacar. En cambio, la parte final contiene giros y sorpresas que invitan a seguir leyendo. Y aunque la parte final es la que más me ha gustado del libro, el final en sí me ha parecido demasiado acelerado y necesitaría más desarrollo.

Kate no ha terminado de convencerme: yo esperaba una evolución por su parte a lo largo de la novela, pero no un cambio tan drástico. ¿Tal vez sea la única a la que le ha parecido que esta chica tiene doble personalidad? Por otro lado tenemos a Jayden, el hijo de Kate, quien es el protagonista en la segunda parte del libro; a ratos me gustaba, otros no quería saber nada de él, otros me era indiferente… un personaje que ha pasado sin pena ni gloria. Galatea supera a los protagonistas, y me ha gustado que Dianna se arriesgase a introducir con sutileza una relación entre Kate y Galatea, adentrándose en un tema que muchos autores no se atreven a tocar.

Hay que valorar el esfuerzo y el trabajo que ha hecho la autora para lograr autopublicar su libro, ya que no es un mundo fácil. Y aunque el diseño está muy trabajado y podría competir con el de varias editoriales, no puedo decir lo mismo del interior: hay muchos errores gramaticales y de impresión, incluso páginas que sobrarían; pero estoy segura de que si hubiese pasado por manos profesionales le habrían dado el pulido necesario para que alcanzase algo más de nota.