¿Cuantos datos de personas y empresas dependen a día de hoy de las decisiones de una administración dirigida por Donald Trump? ¿Tu empresa almacena o usa servicios de Google, Dropbox o Amazon? ¿Crees todavía que no pueden cambiar las normas de un día para otro?
En menos de lo que tardo en escribir este párrafo, Donald Trump puede cancelar un acuerdo que firmó ayer mismo, amenazar a varios países con los aranceles, exigir una segunda, tercera o cuarta negociación, cambiar una ley para hacer un nuevo decreto…
Cantidades ingentes de datos personales y de empresas se encuentran almacenados en Nubes de empresas tecnológicas de Estados Unidos. Esos datos están bajo «la custodia» de empresas como Dropbox, Amazon, Google o iCloud de Apple.
Podemos suponer que todos esos datos se almacenan bajo unas escrupulosas normas de seguridad y de protección de datos. Por supuesto cumpliendo RGPD (Reglamento General de Protección de Datos), incluso mejor que en la propia Europa, origen de la norma. Eso es al menos lo que declaran en sus páginas web.
Suponiendo todo esto, mucho suponer, ¿quién puede asegurar que mañana Donald Trump no va cambiar las normas y limitar o bloquear el acceso a esos datos?
A parte de las sanciones económicas, los aranceles y los portaviones frente a las costas. Resulta que una amenaza para un país también puede ser: Cortar por lo sano con los servicios de Internet o el acceso a los datos de la Nube y aplicaciones de las empresas.
¿Sabe la gente y las empresas dónde residen sus datos en la Nube?
Por decirlo de forma sencilla. A muchas empresas les ha importado un pimiento saber dónde están sus datos almacenados y en qué lugar residen sus aplicaciones.
Es normal, dada la escasa atención prestada al RGPD que aún no ha sido entendido. Se ha concedido mucha importancia al papel y poca al mundo digital.
La realidad es que miles de empresas guardan su información en los servidores de grandes empresas de los Estados Unidos.
Muchos, nunca han escuchado las insistentes recomendaciones de usar servicios cuyo lugar de almacenamiento estuviese en Europa o países de América Latina (con leyes equivalentes).
Es hora de reflexionar un poco y poner la duda sobre esas empresas de California, sin considerar otras dudas referentes a la privacidad. Se trata de esas grandes compañías, que con sus servicios gratuitos y casi sin que nadie se de cuenta, han otorgado poder sobre los datos al país de Donald Trump.
Insisto en que ya no decimos que puedan cambiar de nuevo las leyes de privacidad. La cosa sería mucho más grave. Se trata de que simplemente y de alguna manera todos esos ficheros o datos de las empresas no estuvieran accesibles.
La información es poder, ese poder se puede ejercer con el simple hecho de bloquear la actividad económica de muchas empresas, una forma de hacerlo es cortando temporal o totalmente el acceso a los datos.
Personalmente, me horrorizo cuando veo empresas informáticas españolas que revenden servicios como Google Suite o Amazon para otras empresas y ni siquiera ellos saben dónde demonios se están almacenando los datos.
Me horrorizo aún más, cuando hace poco, hablaba con un responsable de una multinacional española del acero y usaban intensamente muchos servicios de Google. Insisto, ya no es cuestión de seguridad, ni de privacidad, es una cuestión de estrategia, ¿Están en manos de una administración dirigida por Trump? ¿Y si en lugar de imponer aranceles le da por bloquear las cuentas de esas empresas?
Nota: Declarar el lugar de residencia de los datos está contemplado en RGPD. Otra cosa es que se quiera cumplir. Nosotros lo hacemos en esta página: https://dataprius.com/dataprius-proveedores.html además de firmar los contratos en PDF y no con un click en una casilla y otro en el botón de siguiente.
¿Ha pensado en esto alguna empresa que utilice Dropbox o Drive?
Por desgracia o por ignorancia, muchas de ellas o la mayoría, ni se lo han planteado.
No se han cuestionado el lugar de almacenamiento de los datos y si alguna lo ha hecho ya sabe que los datos y los archivos transitan por servidores localizados en los Estados Unidos.
¿A quién preocupa esto en Europa?
A nivel europeo tenemos a Alemania que parece ser de los pocos países dónde si se piensa en estas cosas y de hecho hay mucho movimiento al respecto.
En Alemania llevan muchos años insistiendo en que las empresas deben usar servicios en la Nube con localización en Europa. En una economía altamente industrializada, la computación, las aplicaciones y el Cloud son vitales para el funcionamiento del sistema económico.
En general, las leyes europeas de protección de datos como RGPD y muchas otras normas, han sido impulsadas por Alemania. El tema preocupa y mucho desde hace tiempo.
Existe incluso un caso insólito, Microsoft Azure que es un grande del Cloud, con origen en Estados Unidos, tiene una sede en Alemania con domicilio social allí y cumpliendo normas europeas. También en Irlanda.
Por ejemplo, nosotros, en nuestro servicio usamos ese almacenamiento, en definitiva, un proveedor elegido por muchas empresas europeas.
Cuando almacenamos archivos puede que estén junto a los servidores de las líneas aéreas que usarás en tu próximo viaje, los datos de tu banco o los de tu compañía de seguros.
Azure Alemania (Europa) : https://azure.microsoft.com/es-es/global-infrastructure/germany/
En España, hace tiempo que la AEPD (Agencia Española de Protección de Datos) también recomienda tener un almacenamiento y hacer uso de aplicaciones y servicios Cloud localizados en Europa.
Hay que decir que la AEPD es muy cauta en sus comunicaciones, tanto que denota cierto temor por no molestar a los grandes de Internet. Ahora con Donald Trump deben estar bastante temerosos de enfadarlo.
El mundo digital y los datos son importantes para las economías de los países.
Europa tiene un grave problema que puede convertirse en una oportunidad de oro.
Las leyes europeas no cambian cada cinco minutos por decisiones interesadas de un individuo como Donald Trump.
A nivel mundial países como China, Japón o Rusia enfrentan este problema de diferentes formas y cada uno por su cuenta.
En el tema de los datos, Europa siempre se ha encontrado en muy buena sintonía con América Latina. Muchos países han adoptado normativas de protección de datos compatibles. Los acuerdos se realizan con proyección a largo plazo y consensuando lo básico.
La economía es global y digital, esto es evidente y no hay ni que mencionarlo. El mundo depende de las redes, de los datos y de las transacciones con ellos.
Europa debe hacerse independiente en la Nube respecto a los datos y los servicios para empresas. En esto debe incluir a los países de América Latina porque el trabajo de consensuar las legislaciones ya está hecho.
Lo ideal para crear esa independencia Cloud Computing sería:
- Un modelo estándard de centros de datos independientes de cualquier servicio o almacenamiento en los Estados Unidos.
- Ese modelos basado en normas estables y con garantías jurídicas puede ser implemendado por los diferentes países
- Que ese modelo fuera además ecológico, basado en renovables, dándo vida a zonas desérticas o desocupadas.
Mientras tanto sólo cabe preguntarse ¿Dónde residen realmente mis datos y mi ficheros?
Referencias:
¿Donde demonios se guardan los archivos en la Nube?
Subir a ‘la nube’ un servicio público pone datos críticos al alcance de Donald Trump
La entrada Almacenamiento de datos en la Nube y el imprevisible Donald Trump. se publicó primero en Blog de Dataprius..
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