Mi marido y yo vamos todos los partidos al Molinón a ver al Sporting de nuestros amores; yo no entiendo de fútbol, pero bueno, se que quiero que gane y cada día me voy interesando un poco más.Esta temporada, con el fresqui que hace tengo un problema: se me queda el culo "helao", vamos, pasmao, congelado perdido, así que el último domingo pensé que esto se tenía que terminar.Tenía dos opciones, una era coserme unas bragas de minky pero la desheché de momento y otra opción, la que escogí, era hacerme una almohadilla para estar en mi asiento y, ya que me ponía la iba a hacer con respaldo, un "dos por el precio de uno".En el descanso del partido contra el Betis (fue el primero y único que hemos perdido este año), saqué un papel y lo doblé según las medidas del asiento. Así que ya estaba preparada.Compré dos rectángulos de espuma de un grosor de 2 cm de tamaño 36 x 32 cm y con un trozo de tela plastificada de Ikea que tenía en casa de medio metro (y ancho de 145cm) me puse manos a la obra. El motivo de comprarla plastificada es meramente por higiene, cuando se manche pasaré la bayeta y listo, ni lavadora ni ná.Simplemente corté la tela a 39 cm de ancho y el largo de la pieza de tela lo dejé tal cual para doblarlo. Además corté una tira todo lo largo de la tela de 4 cm de ancho para los laterales y el asa.Lo primero de todo es coser la tira lateral en el rectángulo que haría la tela si la doblara por la mitad. No hace falta más porque, al doblar la tela, la tira que hemos cosido en la primera mitad se corresponde con la cara de enfrente, sólo hay que terminarla de coser.Todas las costuras las he hecho a un centímetro del borde, y con cuidado, que a veces no me corría muy bien en la máquina.
He marcado el centro de la tela con un piquete para saber donde va a doblarse.
He bordado el nombre del Sporting en la almohadilla, primero para jugar un poco con mi máquina y después por tenerla "marcada", vaya a ser que algún amigo de lo ajeno me la quiera birlar.
Recordad que cuando cosamos la tira todo alrededor, hay que dejar un agujero de unos 15 cm para poder dar la vuelta a la funda y poder meter las espumas.
Cuando esté cosida, damos la vuelta, asentamos un poco las esquinas con la mano y metemos la primera espuma encajándola bien al fondo para que no "baile".
Ahora, con el prensatelas de cremallera invisible (es el que más se queda pegado al borde de la espuma) he hecho una costura para dejar bien delimitada la zona de la primera espuma y que no se pueda mover. Antes he de deciros que había controlado que me entraban las dos espumas y un espacio para doblar la almohadilla y poner el asa, que no ha sido así a "lo loco".
Como ya tengo más de la mitad hecho, preparo el asa, para ello cojo un trozo de tela dos o tres centímetros más larga que el ancho de la almohadilla y la doblo sobre si misma metiendo una tira de goma eva para hacerla un poco más resistente. He puesto una cinta en la cara inferior porque así me he ahorrado hacer costuras, simplemente envolví la goma eva por ambos con la tela y puse encima la cinta, cosiendo por los extremos, es lo más sencillo y rápido.
Hay que coser el asa, para ello la coloco a medio centímetro de la costura que he hecho para asegurar la primera espuma y coso un trozo en cada extremo de unos 10 cm. He pillado las dos caras de la funda (la de arriba y la de abajo) juntas para coser el asa, así delimitan el espacio donde encajará la segunda espuma.
Como ya está metida la segunda espuma (lo acabo de hacer) ya sólo queda cerrar el agujero (no es muy fácil que quede bien porque está todo tan apretado y tiene tan poco espacio el prensatelas que es casi una obra de ingeniería.
Ultima noticia: Hoy he estrenado mi almohadilla y el resultado no podía ser más astisfactorio: Sporting de Gijón 3, Numancia 0
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