Los que me conocen saben que soy una mujer alta, y que me suelo quejar de no encontrar calzado mi talla. Ahora no es tan complicado, pero si llevas un 41 coincidirás conmigo en que encontrar algo que realmente te guste, y que además te quepa, no suele ocurrir.
Ya había hecho alguna que otra alpargata de ganchillo antes, casi siempre como muestra para algún taller, pero nunca se me ocurrió hacerlas para mí. No hasta que le vi un modelo como este a Juana.
Después de darle muchas vueltas y cambiar algunas cosas me salió este modelo, muy favorecedor y sorprendentemente cómodo. El talón es bastante más alto, y está reforzado por una cinta de algodón para evitar que ceda con el uso.
Si tuviera que repetirlo usaría una aguja de ganchillo más fina con el fin de obtener un tejido más denso. Por lo pronto le experiencia ha gustado como para repetir :)