La Alta Costura de París es puro sueño. Los diseñadores crearon magia en sus preciosos diseños, prendas que sólo llevarán quienes puedan permitirse pagar sus exorbitantes precios; el resto podremos disfrutarlas en las páginas de las revistas y admirarlas en la alfombra roja. Zuhair Murad no decepcionó en esta edición. ¡Qué viva el brillo!
Elie Saab siguió con su dinámica romántica, Dior otorgó modernidad a la silueta. Atelier Versace consiguió gran repercusión mediática, su silueta sensual se erigió como triunfadora. El color negro sigue siendo un clásico, Giambattista Valli lo trabajó con sus volúmenes característicos. Valentino dedicó la mayoría de sus prendas al color negro y las combinó con accesorios dorados tipo romano. Chanel tuvo como puesta en escena un casino, sus clásicas prendas se modernizaron en prendas y estampados más propios del siglo XXI.
El maquillaje en Atelier Versace fue nude, con cejas marcas, y los ojos se destacaron con una sombra verde. El cabello adoptó un aire sensual gracias a unas ondas deshechas y las modelos llevaban diademas de flores. ¿Será que querían copiar un poco a Valentino? Sea como sea, ese toque floral es ideal.
En esta ocasión Valentino se decantó por diademas colocadas en el borde de la frente. Destacaron los complementos dorados de estilo romano.
El maquillaje en Dior fue sutil, sombras melocotón y labios con un toque de gloss.
Las plataformas de Dior con un toque de brillo gracias a los pailletes fueron la sensación. ¿Qué tendencia te ha gustado más? En esta ocasión me decanto más por Valentino.
Fotografías vía Style.com. Feed de esta entrada
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