Los aerogeneradores, si bien son una forma de crear electricidad con relativamente poco impacto medioambiental, comparado con otras fuentes de energía menos limpias, tienen el mismo inconveniente que las otras y es que su posición es fija.
Para solucionar este problema, una empresa llamada Altaeros Energies (Massachusetts, EEUU), formada por antiguos alumnos del MIT y Harvard (ahí es nada), ha diseñado un aerogenerador flotante. La idea se basa en hacer flotar una turbina en el aire mediante un globo de helio. La principal ventaja de este sistema consiste en la mínima instalación necesaria para ponerlo en funcionamiento, además de generar hasta el doble de electricidad comparado a un aerogenerador “clásico”, convirtiendo así esta solución en una pequeña central de generación portátil ideal para, por ejemplo, lugares remotos o aislados. De momento, este aerogenerador sigue en fase de proyecto, realizando pruebas flotando a 100 metros de altura, aunque se espera poder llegar a los 300 metros.
Fuentes: Cnet
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