Estudio realizado por la Dra. Mª del Rosario Ruiz presentado en XXV Congreso Nacional de Medicina Homeopática 2004. Desde www.blogdefarmacia.com nos ha parecido interesante compartir con nuestros lectores este estudio presentado en el Congreso que nos da otras alternativas para casos que desde el punto de vista de la medicina clásica ya no tienen solución posible.
Resumen :
A principios del siglo XXI numerosos pacientes mueren todavía de cáncer, e incluso aquellos que sobreviven demandan mayor atención en los aspectos médicos y sanitarios. Los tumores de partes blandas denominados generalmente sarcomas, son una identidad tumoral que corresponde al 0.8% de la patología tumoral, potencialmente malignos a corto plazo y la recidiva antes del primer año de extirpación toma un papel fundamental en el curso y pronostico de la enfermedad. Los de tipo retroperitoneal tienen una sobrevida pocos meses. Aquí presentamos el caso de una paciente con diagnostico de Leimiosarcoma retroperitoneal que recidivo al mes de la primera extirpación; misma que atendida con tratamiento homeopático -basado en el fondo constitucional de la paciente- ha logrado una sobrevida de 24 meses sin presentar metástasis aun a pesar de haber sufrido las complicaciones características del tumor en la herida quirúrgica, con ulceración infección y necrosis. El manejo desde el punto de vista homeopático. Con esta investigación se pretende demostrar que es posible mejorar la calidad de vida de los pacientes portadores de cáncer con un manejo multidisciplinario, que incluya además del tratamiento oncológico y quirúrgico, el tratamiento homeopático y el psicológico.
Introducción:
Esta investigación trata de un caso clínico elegido en la consulta privada, a donde la paciente acudió con la duda: “…este tratamiento podría ofrecerle una alternativa de curación para su padecimiento?” Ella era portadora de un tumor canceroso (leiomiosarcoma ) considerado habitualmente incurable tratado por la especialidad de Oncología dentro de la medicina alopática, quienes indicaron como único tratamiento quimioterapia y radioterapia terminando con la combinación de ambos –regularmente agresivos -,aunque no aseguraban resultados satisfactorios.
Aunque el tratamiento homeopático y el éxito del mismo se ha puesto en tela de
juicio principalmente por quienes desconocen este tipo de medicina y en ocasiones el propio paciente duda de la efectividad del mismo; en este caso la paciente aceptó el apoyo de un medico especialista en medicina homeopática ; partiendo del síntoma rector; para lograr la elección del remedio o los remedios necesarios atender al paciente incluyendo sus antecedentes heredo-familiares con el objetivo de reconocer el miasma que lo esta enfermando.
Marco teórico:
Los tumores de partes blandas denominados generalmente sarcomas, son una identidad tumoral que corresponde al 0.8% de la patología tumoral. El sitio anatómico donde tienen su origen corresponde a estructuras periféricas como tejido conectivo, subcutáneo y otros tejidos blandos, comprendiendo también tejidos perineurales. El elemento mas característico es de que se desarrollan en base a su capacidad de crecimiento, adquieren gran desarrollo tumoral infiltran tejidos vecinos, vasculares, tendones e inclusive llegan a infiltrar el hueso. Su crecimiento excéntrico puede ulcerar la piel, ocasionando ulceras con su componente tumoral , infeccioso, hemorrágico y necrótico.
La recidiva puede recaer dentro del primer año de la cirugía o en periodos mas alejados ( 1 – 5 – 10 años) , que establecen tipos terapéuticos distintos. La aparición de la misma en el primer año es un factor pronostico decisivo , la recurrencia tumoral esta en relación directa al potencial de recidiva, el cual debe evaluar: volumen tumoral, porcentaje de metástasis, potencial angio/invasor, tipo histológico y grado de diferenciación, tipo histológico, patología de la primera y segunda recurrencia, influencia del sitio del tumor, grado de infiltración: circuscripto, infiltrativo o multicentrico .
La recidiva toma un papel fundamental en el curso de la enfermedad: tres factores determinan un efecto negativa: la presencia de metástasis, la mayoría de la metástasis en la primera o segunda recaída, la recurrencia tumoral aumenta la mortalidad.
Metodología
La investigación ha sido dividida cubriendo las diferentes etapas de evolución que modificaron a su vez el manejo. Diferenciamos cuatro etapas desde el inicio del padecimiento hasta la consulta mas reciente ( 19 de Abril del 2004)
Presentación del caso
Primera Etapa .- Corresponde a la época en que la paciente fue atendida en la clínica hospital # 46 del IMSS con un diagnostico, tratamiento y pronostico desde el punto de vista puramente alopático, iniciando con una resección quirúrgica completa –según el informe del laboratorio de histopatología. Con recidiva completa del tumor en 30 dias y derivación de la paciente para su manejo integral tercer nivel de atención donde fue atendida por el servicio de Oncologia con quimioterapia.
La paciente en esta etapa recibió tratamiento homeopático con Thuja 30c. cada horas por dos semanas. Sin presentar modificación o mejoría alguna. 1º al 15 de Noviembre del 2002.
Segunda etapa .- Se recibió a la paciente por primera vez en nuestra consulta, donde se realizó la toma del caso recordando los principios que señala en el Parágrafo 5 :
Son útiles al médico para ayudarle a curar, los detalles particulares de la causa probable que predispuso a la enfermedad aguda, así como los puntos mas significativos en la historia completa de la enfermedad crónica, los que capacitaran para descubrir su causa fundamental, que generalmente se debe a un miasma crónico…
Nuestra formación como medico alópata nos permitió reconocer que la variedad histológica de la tumoración y el grado de malignidad eran dignos de ser tomados en cuenta, por lo tanto, lo que podría ofrecerle desde el paradigma alopático, era lo que los especialistas en Oncologia estaban ya aplicando: “quimioterapia y analgésicos”; y desde ese punto de vista efectivamente el pronostico era malo tanto para la vida como para la función de la paciente a corto plazo. Hecho que nos dejaba prácticamente sin “un recurso que ofrecer a la paciente”. Sin embargo como especialista en medicina homeopática, sabíamos que podriamos ofrecer ayuda a la paciente “si tomaba en cuenta los síntomas mórbidos…, el miasma…” , siguiendo los principios señalados en el Parágrafo 7 del Organon:
Ahora bien cuando ninguna causa manifiesta predisponente o de sostén (“causa ocassionalis) de la enfermedad deba ser eliminada, nada podremos nosotros percibir de ella como no sean sus síntomas mórbidos ( y habiendo considerado la posibilidad de un miasma y habiendo también prestado atención a las circunstancias accesorias P. 5)…
.
Toma del Caso:
La paciente hasta antes de el actual diagnostico no había presentado enfermedades de importancia para ella a excepción de hipertensión arterial sistémica controlada de manera adecuada , y cuadros de bronquitis en épocas de frío , sin mayores consecuencias al decir de la paciente pues todo ello le permitía llevar una vida funcional y satisfactoria, en el año de 1999 se le diagnosticó a su esposo Leucemia Linfocítica aguda con mal pronostico al decir de los médicos tratantes además de agravarse su problema ya existente de Diabetes Mellitus que causó disminución importante de la en agudeza visual al grado de no permitirle ya laborar pensionándolo, año 2000 contrajo matrimonio su hija mayor hecho que fue grato para la paciente pues hasta entonces a pesar de la enfermedad de su esposo todo marchaba bien para ella, porque podía atender en forma adecuada a su esposo, casa y familia, un año después su hija se separa de su esposo por decisión única y exclusiva de él, hecho que al decir de la paciente le produjo una gran angustia pues se sintió impotente para ayudar a su hija en esa situación, quién además tenia ya 6 meses de embarazo.
Seis meses mas tarde, en el mes de enero del 2002 se detectó una pequeña tumoración dura, fija a planos profundos de forma ovoide de aprox. 5 X 3 cms. de diámetro, dolorosa a la palpación profunda en la región posterior de la espalda, a nivel de la fosa lumbar izquierda, sobre del músculo dorsal ancho a nivel de la fosa renal izquierda notando un rápido crecimiento de la misma, molestándole inclusive durante el decúbito posterior; por lo que decidió acudir a consulta con su medico familiar, la tumoración continuo su crecimiento en forma acelerada por lo que quien lo derivo para su extirpación quirúrgica. La cirugía se realizó el día 5 de julio de 2002 para extirpar la tumoración y enviar muestras al laboratorio de Histopatologia en búsqueda del diagnostico. El reporte del laboratorio de patología refirió una tumoración maligna con mal pronostico a corto plazo: “Leiomiosarcoma moderadamente diferenciado, Malignidad establecida por mas de 10 cms. el tamaño del tumor y áreas con mas de 5 mitosis por lo [sic) campos de alto poderMark” A pesar de haberse extirpado la tumoración completa, la paciente notó que antes del mes la tumoración se encontraba nuevamente del mismo tamaño y características. Fue derivada para su atención al servicio de Oncología del CMNO donde encontraron que la tumoración presento dimensiones semejantes a las que se registraron en la ocasión de la cirugía de su extirpación. E indicaron tratamiento con quimioterapia ( iniciando el dia 13 de septiembre del 2002 durante 4 sesiones cada 21 días). Este nuevo manejo la hizo sentirse deprimida, y físicamente mal, porque se agregaron los efectos y secuelas propios de una quimioterapia, que incluían nausea, vomito, perdida de peso, anemia, vértigo, debilidad y malestar general, adinamia y depresión con llanto fácil.
Cuando la recibimos por primera vez en la consulta homeopatica, la tumoración presentaba una dimensión de 17 x 11 cms. (total 18.7 cms2 ) Con forma ovoide y donde se abordo el caso desde punto de vista miasmatico.
Los síntomas elegidos fueron especialmente la desesperación, el llanto, y la sensación de frustración ante la vida manifestaban: …el sufrimiento que acobardaba, que aterraba a la paciente, era la forma en que se expresaba la enfermedad… van delineando determinadas formas de sufrir… en ella, tal como ya la ha señalado Proceso Sánchez Ortega
Repertorización
1.- Tumor sarcoma en espalda
2.- llanto fácil.
3.- Ansiedad por su salud.
4.- Ansiedad por los demás.
5.- rencoroso (malicioso)
6.- trastornos por cólera reprimida
7.- trastornos por perdida monetaria.
8.- trastornos por preocupación
9.- caquexia.
10.-Quemadura por radiación.
11- anemia.(decoloración pálida –cara)
12.- alopecia.
A los 7 días de iniciado el tratamiento la paciente presentó una mejoría extraordinaria siendo probablemente lo mas objetivo la reducción de 5 cms. de diámetro en el tamaño de tumor , así como un cambio en su estado anímico, como lo refirió ella misma y corroboraron sus familiares “la paciente lloraba casi un 50% menos”, el dolor había disminuido y el apetito se incremento levemente”. Fue una sorpresa aun para la médico tratante, porque justamente esa semana, el oncólogo indico una prorroga: “ retrasando la aplicación de quimioterapia precisamente durante esa semana, debido al mal estado general de la paciente y a la baja hemoglobina que tenia”; suponemos que esa mejoría le proporciono una motivación a la paciente para continuar con el tratamiento homeopático, quien además preguntó si debería “suspender el tratamiento alopático” , por lo que la médico recordando lo escrito en el Parágrafo 1, La elevada misión del médico, su única misión es de restituir al enfermo en su salud, lo que se denomina: curar
Se le indico a la paciente que continuara su tratamiento alopático en el CMNO, y que para los efectos secundarios que presentaba después de las quimioterapias, se le continuaría apoyando con remedios de la Medicina Homeopática. atendida durante 17 citas, una cada semana del 22 de Noviembre al 17 de Marzo del 2002 al 2003; entre las cuales hubo 4 citas intermedias – que corresponden a los dias en que ella recibia quimioterapia- . En total se atendió a la paciente 21 ocasiones antes de su segunda cirugía; para la extirpación del tumor. En la ultima cita de esta tercera etapa, la paciente preguntó a la médico homeópata “ si debería aceptar la cirugía”; y ella le respondió categórica: “Acéptela”.
Nuestro argumento para dar esa recomendación a pesar de que “el tumor había disminuido sus dimensiones casi hasta un 50%,…y el acto quirúrgico puede significar una supresión…”; se soporto en el argumento de que el tumor era solo una manifestación de la verdadera enfermedad de la paciente, y probablemente se requerirían el resto del año –casi 9 meses mas-, y la utilización de toda la fuerza vital de la paciente que “estaba muy deteriorada”, por su propio sufrimiento constitucional y por la quimioterapia y radioterapia recibidas durante los últimos 6 y 3 meses respectivamente. Esta vez el argumento se apoyo en lo señalado por Hahnemann en el Parágrafo 2:
La curación ideal consiste en restituir la salud de manera suave, rapida y permanente, o sea e extirpar y aniquilar la enfermedad en toda su extensión por el camino mas breve, seguro e inofensivo..
Tercera etapa-. Se refiere al tiempo entre: a).- la segunda cirugía de la paciente (3 de Abril del 2003), la infección y manejo de la misma. Durante esta etapa (los meses de marzo a noviembre del 2003.) la paciente no recibió tratamiento médico homeopático.
En esta etapa suponemos que la paciente consideró “que los cirujanos habían extirpado el tumor - causa objetiva y evidente de su enfermedad-; y por lo tanto ella debería estar curada y no necesitaba mas de la Medicina Homeopática”; por lo que abandonó el tratamiento homeopático, dejando el tratamiento subsiguiente a la cirugía únicamente a la Medicina Alopática, “con lo cual esperaba que lo que quedaba por hacer era esperar la cicatrización de su herida quirúrgica, haciendo las curaciones y tomando los antibióticos y analgésicos que le indicaron”. Sin embargo a este respecto el Parágrafo 8 del Organon señala:
No es concebible, ni experiencia alguna en el universo podrá jamás probarlo, que una vez eliminados todos los síntomas de la enfermedad y la totalidad de sus fenómenos perceptibles, debiera o pudiera quedar algo a la par de la salud, o que la alteración mórbida pudiera subsistir internamente sin haber sido erradicada.
La paciente acudió nuevamente a consulta homeopática en el mes de mayo, presentando signos y síntomas de una infección por anaerobios, con secreción purulenta verde, abundante , de olor “dulzón” que sugería la presencia de pseudomona aeruginosa; dicha infección se encontraba en la cicatriz quirúrgica que estaba completamente destruida por necrosis y además se extendía hasta el glúteo y parte de la pared abdominal. La paciente aquejaba fiebre, dolor ardiente, desesperación y ansiedad por su salud llanto por dolor y sangrado de la herida. Se indico Mercurio Vivo 30 c. y al día siguiente la hospitalización para aseo quirúrgico de la lesión, pero sin dejar su tratamiento homeopático.
En el hospital de tercer nivel fue atendida por el servicio de Cirugía Plástica y Reconstructiva donde le practicaron cultivos de la herida y se comprobó infección por Pseudomona Aureginosa, permaneció hospitalizada, le practicaron aseo quirúrgico y después de controlar la infección, decidieron cerrar la herida dehiscente con una b).- Tercera cirugía con retiro de Malla Marlex ( aplicada en la cirugía anterior) y colocación de expansores de tejido por (19 de Junio del 2003), pero al no poder acercar los bordes de piel de la herida, aplicaron Expansores de piel y volvieron a intervenir con el objeto de cerrar la herida en forma quirúrgica. c).- Cuarta cirugía para reconstrucción, retiro de expansores y aplicación de una nueva Malla retenedora ( 7 de octubre del 2003) y la dehiscencia de esta ultima cirugía y nueva reinfección. Recibiendo tratamiento y soporte con antibióticos de amplio espectro, analgésicos opiáceos y curaciones locales diarias.
Esta ultima cirugía se reinfecto, la herida volvió a “desgarrarse” y ante la desesperación y dolor que presentaba la paciente, los familiares y ella decidieron volver a buscar el tratamiento homeopático, en el mes de noviembre ( exactamente 1 año después de la primera consulta)
Cuarta etapa. Refiere el regreso de la paciente al tratamiento homeopático y su evolución actual. (Noviembre del 2003 a Abril del 2004).
Inicialmente me acobardo estar frente al cuadro que presentaba la paciente en esta ocasión, pero para retomar el caso , se apoyo en la “hipótesis de una patología profunda, nuevamente en lo miasmático…” que señala Proceso Sánchez:
…la mayor parte de las gentes que han pasado frente a nosotros, muestran anomalías morfológicas muy notables , que formulan de inmediato la hipótesis de una patología profunda, de una patología heredada, mas bien que adquirida, que corresponde fácilmente a muchas generaciones de las cuales esos individuos, como nosotros mismos somos una continuación que arrastra la huella de sus defectos o fallas ya sea en su nutrición o en su conducta o en la liberación de sus padecimientos, como un lastre permanente, deformante y fatal. Esto es precisamente lo miasmático…
Fue necesario ubicar los síntomas que nos dan razón del conflicto mas importantes como indica Proceso Sánchez:
Cuando el obstáculo del miasma es tan considerable que hace sentir la deformación de la tendencia de nuestras realizaciones, en tal o cual sentido, produce el síntoma o los síntomas que nos dan razón del conflicto entre el yo que propugna por manifestarse y el obstáculo o negatividad que constituye lo miasmático
.
En esta ocasión se eligió el remedio constitucional ubicando los siguientes síntomas a) trastornos por tristeza, b) llanto incontrolable, c) angustia por su salud, d) ansiedad por el futuro y e) Manifestación inequívoca de dificultad para el cierre de la herida quirúrgica. “Parecía como si se negará a curarse, como si necesitara además de las lagrimas todo este “agujero” para manifestar su tristeza ”; anotó la medico homeópata, y se preguntó ¿por que? ¿Que puede causarle tanta pena a esta mujer? . Así dirigió el nuevo interrogatorio y encontró un nuevo hilo en la trama, un hilo mucho mas profundo…verdaderamente miasmático; que debería atenderse para lograr el manejo de la paciente buscando la curación ya que la enfermedad puede ser vencida por la fuerza vital, como señala el Parágrafo 9
… la fuerza vital espiritual, la energia (“Dynamis”), que anima al cuerpo material…. de modo que nuestra mente intrínseca y dotada de razon, puede emplear libremente sus instrumentos vivientes y sanativos, sin restricción alguna, en los propósitos mas altos de su existencia…
Siguiendo las recomendaciones del maestro Proceso Sánchez Ortega:
…clasificando todos sus signos y síntomas, en concordancia con las características señaladas en cada miasma, estimando la forma en que están atando o deformando la correcta expresión de la individualidad de ese hombre, y deduciendo en la mejor de sus formas, su probable evolución; esto es : su pronostico, no con las hipótesis de una patología organicista, que hace generalizaciones de las particularidades, sino ante la realidad especialísima del sujeto que tiene delante, al que puede investigar en sus múltiples aspectos como persona, humana utilizando sus antecedentes, su presentación, el transfondo de este momento que presenta de su vida y la proyección a la que se disponga y su posibilidad ante el testimonio de lo negativo que constituyen sus condiciones miasmáticas.
Desentrañamos en el interrogatorio que la paciente desde niña se había sentido abandonada por su madre. Pero en el “hoy” el fallecimiento de su hermana –por cáncer en esos meses- y el nuevo desinterés que la madre presentó para ir a “consolar” y “abrazar” a la paciente , en este momento “especialísimo” –como señala acertadamente P. Sánchez- en que ella se sentía “débil para enfrentar la vida y con mucho temor por su enfermedad”; la madre se negó a ir a visitarla; “le recordó toda su soledad”, como dijo ella misma en medio de un llanto que parecía brotar desde lo mas profundo de su ser –porque todo su cuerpo se sacudía en medio del sollozo “No le intereso a mi mamá”. – a pesar de tener la compañía y el apoyo y el cariño de su esposo e hijos, lo que ella mas deseaba era una caricia o atención de su madre. El medicamento elegido fue Pulsatilla 0/6 en dosis única con excelente mejoría de su estado general y de la herida; inclusive esa navidad (2003) se reunió con su mamá para saludarla y comer con ella, -dijo sentir que la entendía y que ya no le dolía acercarse a ella-.
Resultados
La paciente tratada con medicina homeopática presentó una reducción de casi el 50% de la tumoración que había recidivado, circunstancia que facilitó la segunda intervención quirúrgica para extirpar el tumor , y que fue practicada en el CMNO en el mes de Marzo del 2002. Sin embargo, a la suspensión del tratamiento homeopático, tuvo en variadas ocasiones dehiscencia, infección y necrosis, así como tres intervenciones quirúrgicas –dos con la intención de cerrar la herida –en las que aplicaron mallas de retención- y una para drenar y localizar una válvula de los expansores que le habían aplicado; pero al reiniciar el tratamiento homeopático, la paciente presentó mejoría de las infecciones, disminución del dolor y cierre de la enorme herida postquirugica que presentaba; así como cambio de su estado anímico y del dolor local.
El Dr. Juan Manuel Castro, jefe del servicio de Oncocirugia, quien han sido responsable del caso hasta la fecha, ha realizado dos escaneos en búsqueda de metástasis, el primero realizado en el mes de Noviembre del 2003 y el ultimo realizado en Abril del 2004, sin encontrar a la fecha metástasis. Nos encontramos en espera del resultado del ultimo escaneo por ecosonografia y resonancia magnética para conocer la evolución de la paciente.
Hasta el mes de Agosto del 2004 la paciente ha sido atendida durante 41 ocasiones en la consulta homeopática, la herida prácticamente se ha cerrado – el servicio de Cirugía reconstructiva la recibe cada semana y no se han podido explicar tan repentina mejoría- el estado de animo de la paciente es excelente –desde la navidad del 2003 volvió a cocinar y a viajar y sonríe frecuentemente-, su nieta y su esposo se encuentran saludables.
Conclusión
Hahnemann observó una predisposición cubierta en los constitucional, en o constante del hombre orgánico y la persistencia de la forma de su expresión. Es decir, en los verdaderos enfermos habían y sucedían estados de sufrimiento al parecer distintos para el observador superficial pero que se descubrían en una observación minuciosa. Un anexo de identidad, una característica que los enlazaba; y así, lo que parecían enfermedades diferentes presentadas pro el mismo enfermo a través de su biopatologia, están relacionadas por un trasfondo que constituía su predisposición a padecer en una forma característica tanto en las disfunciones como en las lesiones, reconociendo en ellos el germen latente de todo proceso patológico o la causa inevitable de los desequilibrios evidentes que reconocemos como enfermedades, que no se pueden hacer deducir totalmente de factores ocasionales, sino que involucran siempre una condición receptiva del individuo, esto es su predisposición para ellas. Así al enfermedad aguda denota la extensión y forma lo constitucional que la determina y que se reconoce como la causa primera.
Siguiendo los principios de la medicina homeopática, la relación que existe entre la forma particular que tiene un paciente de manifestar su sufrimiento y la elección del remedio de acuerdo con la ley de la similitud –prescrito a una potencia adecuada, correspondiente a la vitalidad del enfermo- seleccionando especialmente los síntomas mentales como guía, puede lograrse la curación plena del individuo atacado por un cáncer de mal pronostico, considerado incurable para la medicina alopática.
Este caso nos permite invitar a la comunidad medica a trabajar en forma multidisciplinaria para la atención de casos como este y otros crónicos y de aparente difícil manejo, buscando la oportunidad de ofrecer un mejor pronostico para la vida de los pacientes y sus familiares. Y es aquí que vale la pena citar una invitación realizada en 1934 por Don Higinio G. Perez fundador de la Escuela Libre de Homeopatía de México.
En la actualidad podemos decir sin temor a equivocarnos, entre el médico alópata y el medico homeópata, solo hay diferencia en el modo de interpretar su doctrina, pero el acercamiento es ya notable y hay puntos en que las enseñanzas se confunden como dos líneas divergentes que se tocan , cuyo vértice que es la verdad, vincula los procedimientos y las tendencias… Si la teoría y la practica se correspondieran, homeópatas y alópatas, aun pensando de manera diferente, llegarían al mismo fin: la curación de las enfermedades.
BIBLIOGRAFÍA
1 Hahnemann, S, Organon de la Medicina ( (sexta edición, prologada por Boericke), versión en castellano Jorge Torrent, Porrúa, México, 1989 pp. 78-79. El parágrafo completo termina diciendo “ ….en estas investigaciones será preciso tomar en consideración: la constitución probable del paciente (especialmente cuando la enfermedad es crónica) su moral, su intelectualidad, su ocupación, sus hábitos y su modo de vivir, sus relaciones sociales y domesticas, su edad, su funcionamiento sexual, etc.
2 Hahnemann, S, Organon de la Medicina (sexta edición, prologada por Boericke), versión en castellano Jorge Torrent, Porrú.a, México, 1989 pp. 80-81.
3 Sánchez Ortega, idem, pag. 21
4 Organon, idem, Parágrafo 1
5 Organon. Ibid.
6 Hahnemann, S, Organon de la Medicina (sexta edición, prologada por Boericke), versión en castellano Jorge Torrent, Porrú.a, México, 1989 p 81
7 Sánchez Ortega, P, Apuntes sobre los miasmas o enfermedades crónicas de Hahnemann. Edición particular. México, 1991, p. 68
8 idem, p. 70
9 Hahnemann, S, Organon de la Medicina op. cit p. 82.
10 Sánchez Ortega, P, Apuntes sobre los miasmas o enfermedades crónicas de Hahnemann. Edición particular. México, 1991, p. 71
11 Perez, Higinio G, Homeopatía en la Alopatía, publicado en el folleto Los médicos de la Escuela Libre de Homeopatía, marzo de 1934. en Francois Flores, Fernando, “La Escuela Libre de Homeopatía”, Biblioteca Homeopatía de México, A.C. México, D.F, 2004, p 370.