Amaños de partidos: lo que debemos saber (II/II)

Puedes leer la primera parte de este artículo aquí.

Se crea así una modalidad de corrupción: “amaños de partidos“, para conseguir beneficios, aprovechándose de una relación ventajosa con entidades particulares, y destacando la penetración de este delito en el ámbito deportivo para alterar de forma fraudulenta resultados deportivos en el ámbito profesional. Ambas conductas se han estado produciendo considerablemente en los últimos años, por lo que nuestro país se ha visto en la obligación de prepararse para combatirlo.

Instituciones

La Unión Europea apuesta por copiar el modelo español. Todos los países deben modificar sus códigos penales para incluir los amaños de partidos, como ya existe en España. FEDERBET es también colaboradora del Consejo de Europa, que como ya sabemos es una organización internacional de ámbito regional destinada a promover, mediante la cooperación de los estados de Europa, la configuración de un espacio político y jurídico común en el continente, sustentado sobre los valores de la democracia, los derechos humanos y el Imperio de la ley.

Es importante conocer, a pesar de todos los parabienes y cortafuegos, que la Liga española es “la segunda más afectada por el match-fixing” por detrás de la Premier.  Europol cifra el número de partidos amañados en 2014 en 460. De los 300 casos de partidos amañados que FEDERBET consideró probados en el año 2013 por ejemplo, no hay ninguno en Primera ni Segunda División española, y solo uno en la Premier League inglesa.

Por parte de la UEFA, máximo organismo del fútbol europeo, se está desarrollando una filosofía al respecto de tolerancia cero y, basa sus actuaciones en “educación, investigación y sanción”, la colaboración con entidades policiales y judiciales, y los acuerdos de cooperación con la Europol. Y utilizan, tanto la FIFA como la UEFA, la tipificación y sanción del amaño de partidos en su normativa reguladora.

Implicados

Aunque es un tema relativamente “tabú” en el ámbito deportivo en general, y ya se sabe que a nadie le gusta que le pregunten por este incómodo asunto, sí que se han conocido algunos casos relacionados y se han oído comentarios acerca de estas prácticas antideportivas, y de cómo se llevan a cabo. Según algunas de estas fuentes, los deportistas implicados lo hacen siempre por dinero. Así, una vez que el jugador, árbitro o juez acepta el primer soborno, es más fácil de presionar posteriormente con la amenaza de delatarlo. De ahí la importancia de concienciar a los futbolistas de que no den ese peligrosísimo primer paso. Otras actuaciones similares se dan por la potencial implicación de los árbitros. Un ejemplo, en este caso positivo, es el de Mario Panayi, árbitro chipriota que denunció varios partidos amañados, motivo por el cual recibió amenazas por parte del crimen organizado.

No cabe duda de que los deportistas y árbitros son los protagonistas más castigados por sus implicaciones, puesto que, aunque todos podemos ser, de una forma o de otra, cómplices o estar implicados en estas tramas de forma indirecta, son ellos los que reciben un castigo añadido como es el del rechazo social por su calidad de famosos o conocidos.