Hay paisajes que se quedan en la memoria... grandes campos llenos de amapolas que cubren de rojo el horizonte. No sé qué tienenestas flores silvestres que las hace especialmente atractivas, quizás es la rapidez con la que se desintegran cuando las cortas o la increible textura similar al papel de sus pétalos, o que crecen en grandes manchas efímeras al anunciarse la primavera... Pavots
La instalación Pavots de Jannick Deslauriers, una escultora que trabaja con textiles, recrea estas sensaciones que las amapolas nos trasmiten para crear un ambiente de ensoñación en el que paseamos entre amapolas que vuelan y son delicadas.