Amarillo para dar un toque fresco a tu decoración

Casi sin darnos cuenta, en un abrir y cerrar de ojos, como dirían muchos/as, hemos llegado a la primavera y hemos comenzado hace algunas semanas a disfrutar del buen tiempo que trae siempre consigo, de su luz y de la fuerza y energía que transmite. Y como no puede ser de otra forma, en estos días de buen tiempo, apetece contar con acogedores interiores con cierto ‘toque’ de frescura acorde a la estación del año en la que nos encontramos…

Cambiar totalmente la decoración de nuestro hogar o el color de una estancia con el fin de darle un aire más alegre y primaveral, puede resultar además de complicado muy costoso. Sin embargo, no siempre es necesario un cambio radical, a veces, si recurrimos al ingenio y apostamos por dar rienda suelta a la creatividad, a través de pequeños detalles se pueden lograr grandes resultados. Y en esta ocasión os proponemos el color amarillo como recurso ideal para añadir frescura a cualquier espacio o estancia de la casa.

Utilizado en exceso se puede convertir en un color complicado de combinar, pero lo cierto es que si recurrimos a él como protagonista de pequeños detalles es mucho más fácil introducirlo en cualquier decoración. La gran ventaja es que al tratarse de un color tan llamativo y alegre, aunque se utilice en pequeñas dosis, no pasará desapercibido. Además, no sólo se trata de un color llamativo, sino que cuenta con mucha luz, por lo que resulta ideal también cuando se busca resultados en este sentido…
A continuación os mostramos algunos ejemplo de cómo el color amarillo en pequeños destalles puede cambiar por completo un ambiente: 

Esta zona de living comedor decorada con colores muy neutros, como el blanco, beige o negro, adquiere vida y alegría gracias al un delicado estampado en la alfombra que combina el color amarillo y algunos textiles.
Este es, sin duda, un ejemplo perfecto de cómo con muy pocos elementos y poca inversión, se puede lograr un aire más fresco en cualquier estancia utilizando para ello el color amarillo.

Si tienes en casa un viejo mueble o elemento y además de darle un aire más fresco quieres transformarlo y que se convierta en un elemento más actual e incluso modernos, prueba a pintarlo de amarillo, cambiará radicalmente la estancia. Estos cabeceras y camas son una buena muestra de ello…

Incluso si no te quieres complicar demasiado y lograr un cambio rápido, el amarillo es perfecto para conseguirlo. Con tan sólo un cojín en tonos amarillos combinado con tu decoración habitual y algunas flores naturales, lograrás ese extra de frescura y un aire primaveral difícil de lograr con otros colores.

¿Te animas a añadir unas pinceladas amarillas a tu decoración esta primavera?