Nueva York y Virginia son los estados de los Estados Unidos de América que ha elegido la todopoderosa Amazon para sus nuevas sedes. Para allá se lleva los dineros y el empleo. Dicen que dará trabajo a 50.000 personas. Espero que trabajen cómodos. Trabajar para un jefe siempre es complicado y más complicado es si lo haces rodeada de compañeros más interesados en tu vida privada que en currar como Dios manda desde que echó a la humanidad del Paraíso terrenal.
¿Hay que ser cola de león o cabeza de ratón? pregunta siempre un amigo mío cuando nos reunimos para olvidar el calvario de las penas con unas cervezas. Son cola de león trabajadores como los trabajadores de Amazon. Curras por un salario más o menos digno, te das codazos con los compañeros para ascender y acabas jubilado sin que te echen de menos en ningún sitio. Son cabeza de ratón los emprendedores que se dan codazos con la competencia para mantener su empresa a flote, conquistan a los clientes solucionando sus problemas con productos o servicios y se jubilan dejando un recuerdo en el barrio donde se cierra la tienda que tan bien servía a la barriada.
No nos pongamos filosóficos. La noticia de que Amazon abre nuevas sedes es una buena noticia. Mejor sería si las abriera en esta España nuestra. Incluso podría mejorarse la noticia si los señores de Amazon nos dijeran que iban a pagar todos los impuestos que tendrían que pagar en España y no los pagan. Estos gigantes como Amazon son el triunfo del capitalismo de grandes beneficios y regateo de impuestos a los Estados que necesitan financiación para ofertar a sus ciudadanos buenos servicios públicos.