Revista Cultura y Ocio

Ambición humana , destrucción animal

Por Mayriel

Nuevamente tengo que hablar de la maldita ambición humana que trastoca la vida de los animales.

Supongo que recordaras a Kenny, aquel tigre con Síndrome de Down por culpa de las zarpas de los humanos .

Por desgracia no es el único caso y hoy voy a compartir problema de Pip, un pobre cachorro de chiguagua que ha nacido solo con la mitad del cerebro solo porque unos humanos imbéciles decidieron jugar con su vida para hacer una raza mas pequeña y satisfacer los estúpidos gustos de ricachones aburridos…

Aqui va la historia

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 Pip fue abandonado junto con su madre Peggy al lado de una carretera en Basildon, condado de Essex. A Peggy le falta una parte de su pata izquierda trasera y el cachorro nació sin una parte de su cerebro, además sufre de ceguera. Los expertos aseguran que esto se debe a la manipulación del hombre para hacer que su raza sea cada vez más pequeña y después comercializarlos como si fueran un objeto tierno y novedoso.

Para la época de diciembre la demanda de cachoros “taza de té” que es la denominación con la que se conocen los perros de pequeño tamaño aumenta considerablemente. Estos perros suelen ser vendidos a precios elevados por lo que a los comerciantes sin escrúpulos les llama mucho la atención realizar este tipo de negocios.

Pip y su madre fueron llevados al centro veterinario The Animal Health Trust y a Pip se le realizó una resonancia magnética en donde se pudieron detectar problemas cerebrales, le falta una parte de su cerebro que está relacionada directamente con la visión, el equilibrio y la coordinación, sufre de hidrocefalia, y sus nervios ópticos no se desarrollaron completamente, los especialistas nunca habían tratado un caso similar a este.

Los exámenes oftalmológicos revelaron que Pip no se encuentra totalmente ciego, él no responde a reflejos de luz, pero los especialistas se asombraron al ver que fue capaz de pasar las pruebas de obstáculos que le hicieron con gran facilidad. 

Peggy tiene aproximadamente 3 años de edad y Pip tiene tan solo 12 semanas de vida, la buena noticia es que él logrará sobrevivir, pero para ello tendrá que someterse a un tratamiento de por vida, gotas para ojos y claro está, deberán realizarle revisiones veterinarias periódicas. Este par de perros se encuentran actualmente bajo el cuidado de la organización RSPCA Essex South and Southend Dogs Needing Homes.

Esta es la historia y yo, voy a ahorrarme comentarios. NO me merece la pena emplear el tiempo en decir lo que pienso de esa clase de gentuza. Solo queria compartir una historia que me parece importante que se conozca porque por regla general nos dan igual los animales. Solo queria que se supiera que seguiran existiendo personas a las que la ambición les lleva a este tipo de maltrato… Que por culpa de quienes compran animales siguen existiendo desgraciados que se lucran con seres a los que les es imposible defenderse y por los que casi nadie alza la voz

Me repugna pertenecer a la misma raza que esos deprorables humanos

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