Vuelve la actividad al blog esta vez con una nueva ambientación, me volveré a meter en la piel de un
personaje carismático, una mujer que conocimos gracias a la película " La Duquesa" que interpreta
de manera notable la actriz británica Keira Knightley, profundizaré tanto en la mujer real,
como en la película, para saber más sobre esta mujer poco reconocida, nos daremos cuenta de que
el dinero y la posición no dan la felicidad, pero sobre todo lo duro de ser mujer en una época
encorsetada en la que nosotras poco o nada teníamos que decir, a pesar de ello Georgiana Spencer
dejó huella.
Georgiana Spencer (1757 - 1806) (a muchas os sonará el apellido de Georgiana, no vais desencaminadas
al pensar que es pariente de Diana de Gales e incluso de Sara Ferguson ambas ex esposas de Carlos y
Andrés de Inglaterra respectivamente). Pero comencemos con Georgiana, era la primogénita de tres
hermanos y la favorita de su madre, que no dudo en cuanto pudo en arreglar un matrimonio inmejorable
con un caballero de la más alta posición, sin preguntar, ni consultar a Georgiana, el afortunado fue
Guillermo Cavendish, Duque de Devonshire, ella se casó a punto de cumplir 17 años, Guillermo
tenia 26, eran muy diferentes, en gustos, aficiones y carácter.
La nueva Duquesa de Devonshire aunque joven, era educada, culta y con un don social que encandilaba
a los que la rodeaban, pero no a su marido, aunque ella desde el principio tuvo claro que era un
matrimonio de conveniencia, era sin duda, la unión de dos fortunas con nombres importantes, pero
también tenía la plena convicción de que con el tiempo crecería el afecto y la buena relación con su
cónyuge, no podía estar más equivocada, su marido era un hombre gélido con su esposa, no tanto
con sus amantes.
La Duquesa pronto supo de esta situación, de modo que debía ser fuerte y guardar las apariencias,
en publico era la mujer más guapa y feliz de toda Inglaterra.
Las similitudes de Georgiana con María Antonieta son tremendas, fueron coetáneas, al parecer se
conocieron e hicieron buenas migas, eran mujeres especiales, con orgullo y bien educadas, también
coinciden en la pasión por la moda y las fiestas. Cuando María Antonieta moderó su vestuario,
Georgiana creo su propio estilo, su gusto al vestir era reconocido por todos, sus conjuntos eran más
manejables, sustituyó las telas que se llevaban en la época (muarés, terciopelos...) por tejidos como
el algodón, el lino o telas vaporosas como la muselina, dejó atrás aquellos grandes vestidos armados
con miriñaques y creo vestidos ligeros, cómodos y elegantes, este tipo de vestidos fueron un éxito, se
conocerían como "vestidos a la inglesa".
Se peinaba con "pouf" adornados con espectaculares sobreros de ala ancha denominados a la francesa,
estos eran utilizados para salir a la calle, este tipo de sombreros conjugados con los vestidos vaporosos
daban un aire más sencillo a la duquesa, sin quitarle un ápice de elegancia, eso si, en las fiestas los "pouf"
se volvían sofisticados, adornándolos con plumas y pedrería. Al igual que María Antonieta ella misma
diseñaba su vestuario y todas las aristócratas inglesas querían vestir como la Duquesa, adorada y envidiada,
Georgiana era toda una figura social y en cada evento se esmeraba con el vestuario, todos esperaban su
aparición.
Como hemos visto Georgiana era el rostro más relevante de la época georgiana en el Reino Unido,
aprovechando ese tirón, y reuniéndose en su palacio con lo más gradado de la política liberal de su
tiempo, esta fascinante mujer se interesó de un modo especial por la política, algo completamente
impensable en aquel momento, se posiciona al igual que su marido, al lado de los whigs (partido liberal
británico) apoyando fervientemente a Charles James Fox, estaba presente en los mitines políticos,
incluso ella misma participó hablando en alguno, era una mujer muy preparada y tenia tácticas muy
efectivas para recabar votos, esto no fue en absoluto entendido y sus detractores decían que
intercambiaba besos por votos, algo que no era cierto, la anécdota de donde se sacó este rumor
fue por un inocente beso que Georgiana le da a un zapatero para darle las gracias al saber que su
voto era a favor de Fox.
Fue muy criticada por este motivo, una mujer en política no estaba bien vista, era algo completamente
nuevo e intolerable, por eso todo lo que hacia era censurado, pensemos que la actividad política de la
Duquesa de Devonshire en las elecciones británicas fue en el año 1784, ella ya hablaba del voto y la
participación femenina, ideal que aparece con más fuerza en la Revolución Francesa (1789 - 1799).
En las reuniones que se organizaban en palacio no solo asistían políticos, también artistas y literatos,
pronto estas fiestas tomaron mala fama.
El amor en la vida de la Duquesa de Devonshire es un asunto complicado, la película se centra bastante en
esta cuestión, cara a la galería Georgiana es famosa, tiene éxito, la aristocracia, la monarquía y el pueblo la
adora, incluso es un icono de moda, pero el amor se le resiste, ella intenta perseguir el amor, simplemente
desea querer y que la quieran, algo tan sencillo y a la vez tan complejo.
La critica no ha sido generosa con esta película, dicen que es insustancial, lenta, incluso llegan a decir que
los personajes y la interpretación es plana, yo sinceramente no estoy nada de acuerdo. Es una película con
una ambientación espectacular, los palacios y los exteriores son magníficos, la fotografía es fascinante de
la mano de Gyula Pados, ya no hablemos del magistral trabajo de vestuario por el que se llevó el Oscar
Michael O'Connor ( más adelante también realizó con éxito el vestuario de Jane Eyre (2011) y La Mujer
Invisible (2013)). No me olvido de la maravillosa banda sonora de Rachel Portman.
La Duquesa, nos muestra parte de la vida de Georgiana Spencer, desde un punto de vista muy
intimo, con ella podremos comprender el papel que desempeñaba la mujer en los tiempos georgianos,
a pesar de tener una posición, dinero e inteligencia, esta mujer era propiedad de su marido y de las
apariencias, no se quedo quieta intento luchar contra ello y eso queda plasmado en la película de
una manera fehaciente.
Si os ha fascinado la vida de Georgiana no dudéis en ver la película, os dejó un enlace con una breve
biografía, si queréis saber más sobre ella os recomiendo el libro "Georgiana" de Amanda Foreman,
en el descubriréis las luces y las sombras de una mujer prisionera de su tiempo, murió muy joven a los
48 años pero sin duda fue una mujer notable y valiente que intento ser libre, aunque en ese tiempo
ese propósito fuera una quimera.
Me llamo Verónica Pérez, vivo en la isla de Menorca y soy una apasionada del mundo vintage.