Hay pocas personas a quienes les quepan dudas sobre la identidad del famoso Mr. “X” de los GAL, o sobre la ambición del juez estrella desde que decidió entrar en política de la mano de González a un lado y esperando una cartera ministerial en la otra. Después vendrían los tiempos del socialismo buenista del leonés errante y Sanidad fue gestionada por la Sra. Pajín, medio socióloga y sensiblemente menos válida que D. Baltasar con todos sus defectos, aunque eso sea otra historia. Amedo destapa en su libro acontecimientos que ya sabíamos y que carecen de otro valor que dar morbo añadido a un terrorismo de estado que no por ilegal dejaba de gustar a muchos españoles. La cuestión actual es el porqué. ¿Por qué ahora?. El Sr. Amedio ha tenido tiempo más que sobrado a airear sus medias verdades sobre el particular, pero vierte a la opinión pública sus datos mientras el PSOE está más ocupado en los EREs andaluces que en hacer oposición, y el PP con el Sr. Bárcenas que le quita las horas y el sueño a quien debería manejar las riendas del gobierno. La triste y oscura época de los GAL es historia reciente, pero historia; la corrupción política, el secesionismo aldeanista de algunos exaltados regionalistas, el paro o la crisis esconómica, con parte de un triste presente que reclama soluciones más allá de los cotilleos trasnochados de aquello que pudo ser y no fue.