En la quinta avenida de Nueva York hay una tienda de cinco pisos dedicada en exclusiva a la venta de muñecas para niñas. Hasta ahí nada extraordinario. Sin embargo esa megastore, abarrotada de niñas con sus padres, es especial.
Las niñas pueden obtener una muñeca clon de su propia imagen: empiezan por escoger, entre los centenares de modelos ,la que más se asemeja a sus características físicas, con gafas o sin ellas, con su tipo de nariz, su color de ojos, de piel, el número de pecas, el color del cabello...., exactamente igual a la cara de cada niña. Un estilista les aconseja y les acompaña en el recorrido por la tienda, para que en la sección de peluquería la muñeca adopte el mismo peinado que ella, luego en el área de moda la vestirán con el mismo vestido que luce la niña y pasará al Spa para que le hagan la manicura a la hermanita de goma ,y hasta podrá tomarse un batido en la cafetería con su muñeca a la que acomodarán en una sillita especial junto a la familia de la niña. En American Girl , que es como se llama la tienda, pueden celebrar fiestas , aniversarios y decenas de actividades, las niñas con sus clones artificiales.
Es tal el éxito de esta megastore que sus propietarios abren una en Washington y otra en Seattle.
Paseando por Times Square, dos individuos con sendas pancartas de "Ideas Wanted", buscan ideas prácticas y felices. Un tercero las graba, cámara y micrófono en mano. No quieren ideas políticas, quieren ideas felices como que los coches lleven pintada una sonrisa en el parachoques delantero y que nos guiñen un ojo cuando quieran adelantarnos. Te dejan una dirección de mail por si no se te ocurre la idea a "bote pronto" y quieres enviársela en unos días. Vale la de que la tapa de los WC contengan un pedal para no levantarlas con la mano...
Ya se que Nueva York es otro mundo, ni mejor ni peor, como se suele decir tópicamente es diferente. Aquí las luces de Navidad llevan encendidas unos cuantos días y el Black Friday agota las existencias de los establecimientos, mientras la bolsa de Wall Street sigue bajando y los Indignados (O.W.S.) protestan de forma irregular , pero impecablemente organizados.
Por todo ello, reconozco que errático y singular, es quizás por lo que he llegado hasta aquí, por eso y por acabar una novela que no se si publicaré. Sí, he venido a coger algo de aire, no se si fresco, ante tanto recorte y ajuste, ante tanta noticia negativa y tanta falta de ideas ...
!Ah! , y eso no significa que lo de las American Girl me parezca una gran idea... No se ni lo que me parece. Simplemente he quedado boquiabierto y desconcertado. Esto en España lo criticaríamos por ñoño, machista y hasta degradante...no lo se, aquí es un éxito tremendo, como lo de estos outsiders buscadores de happy ideas... No lo se, estoy despistado.
Lo único que se me ocurre es que aquí la gente se quiere a sí misma desde muy pequeña. Por eso se hacen muñecas únicas y a imagen y semejanza de uno, y hasta es capaz de compartir ideas con los demás de forma altruista. Y esa puede ser una buena forma de salir adelante.
Algunas, o muchas cosas deben tener peor que nosotros, prometo buscarlas y criticarlas, si soy capaz.
publicado el 07 junio a las 19:47
las american girls son muy chévere para las chicas la ropa me gusta es fina y muy chévere los artículos jugar con ella es divertidísimo