Si usted es religioso, conservador, cartucho o grave (no estoy diciendo que estas cuatro palabras sean sinónimos) entonces pare de leer y evítese un mal rato.
Anoche vi un programa de televisión en donde estaban invitados un matrimonio gay (casados fuera de chile, por supuesto) y me enterneció.
Me enterneció la manera en que se sentaron juntos y tomaron sus manos, de una manera tan digna, tan poco posada, tan natural y sobre todo tan cálida y tierna… como personas que realmente viven un amor intenso y maduro. Hace tiempo que no veía esa actitud. Ni en heterosexuales. Es que en verdad somos re poco demostrativos, en general. ¡Y las muestras de cariño son tan fomes!Esta pareja me encantó. Y además, la manera en cómo defendían su unión era tan elocuente pero sobre todo, así como su lenguaje corporal, TAN SINCERA.Déjenme pararlo aquí y decirles, de manera muy honesta, que cuando en las películas o teleseries veo un beso entre hombres o entre mujeres, me da nervio. Me da cosa, hago unas pequeña mueca incluso y prefiero no seguir mirando.¡Estoy siendo total y absolutamente sincera! Esto que les cuento en otras partes es de frentón políticamente incorrecto. Y no es que sea una lesbiana en potencia, para nada la verdad, me encanta ser mujer y me encanta ser parte del rol que cumplen los hombres en el plano de nuestra vida íntima (acabo de decir de manera muy fina y diplomática que disfruto de la sexualidad, ¿cacharon esa?).Y bueno… luego de que la pareja expusiera su postura a favor del matrimonio homosexual, aparece una señora, directora de no sé qué organismo no gubernamental que está en contra de la unión homosexual, el matrimonio homosexual y la adopción de hijos por parte de los homosexuales.Entonces yo me pregunto: ¿Hay alguien que esté REALMENTE CALIFICADO COMO SER HUMANO SUPREMO para decir, juzgar y decidir sobre cómo otras personas deben vivir su vida privada? En serio… ¿realmente nos podemos dar TAL importancia, que nos ponemos a crear instituciones que no permite el amor entre personas del mismo sexo? ¿Quién rayos se creen estas personas?
Que el universo no permita que esta gente se encuentre alguna vez en el otro lado de la moneda, en el que pertenecer a una minoría es terrible, horrible y espeluznante. Cualquier tipo de minoría o realidad que te hace alguien fuera de lo común. Porque se sufre. ¡Se sufre muchísimo!
Por otra parte, buscando diversa información para escribir e ilustrar esta entrada, me encontré con consignas anti-gay y homofóbicas que están repletísimas de odio. Pero un odio parido como dicen por ahí. Realmente macabro, que no sabrías definir quién es quién. Ese nivel de agresividad no puede llevarnos a ningún tipo de evolución. A ningún tipo de sociedad en donde seamos más felices. No. Ninguna posibilidad.Digámoslo en serio: las parejas homosexuales que quieren unirse, ¡no le hacen daño a nadie! Es que esto va más allá de si estamos o no de acuerdo. De ser o no religioso. De creer que es natural este tipo de unión o no. ¿Te da nervio pensar en cómo hacen el amor? ¡Entonces no lo pienses! ¿Te pasas el rollo de quien es el hombre y la mujer? Asegúrate de que TUS propios pantalones o faldas estén bien puestos primero.Este debate va mucho, mucho más allá que toda la cháchara conservadora repetitiva, molesta y pasada de moda. Es una REALIDAD SOCIAL señoras y señores y NECESITA SER ENFRENTADA. Qué pretenden acaso, ¿que los mandemos todos a una isla para que no nos moleste y por lo tanto así podamos fingir que no existen?¡¡POR FAVOR!! La vida y unión homosexual es una realidad cercana y específica, así como cualquier otro aspecto de nuestra sociedad. ¿Qué mejor que legislarla y contextualizarla?
Efectivamente creo que la adopción de niños es un tema mucho más complejo que seguramente necesita más estudio del que hay, sin embargo la unión de parejas homosexuales es algo que, como sociedad y personas, no podemos hacer la vista gorda. Y muchísimo menos juzgar.