En este país en el que los políticos sobreactúan exagerando las maldades de sus rivales a veces aparecen personajes de respetable historial que llaman a la cordura, como José María Fidalgo, secretario general de Comisiones Obreras entre 2000 y 2008, y Nicolás Redondo Terreros secretario general del Partido Socialista de Euskadi entre 1997 y 2002...Pinche aquí abajo para seguir leyendo...