El título que nos ocupa en el análisis que os ofrecemos el día de hoy se trata nada menos que de la respuesta de la comunidad de jugadores a las grandes franquicias del género de la construcción y gestión de ciudades (SimCity es el más claro ejemplo, aunque no el único de ellos) que comenzaron a cambiar la temática debido a, entre otros motivos, su incapacidad de innovar o de mejorar la más básica idea o mecánicas del género. Cities Skylines volvió a revitalizar la fórmula original de la construcción y gestión de ciudades hace ya más de dos años, cuando salió a la venta PC, llegando a convertirse en todo un éxito tanto para la crítica como para los usuarios, dejando muy claro que el género sigue muy vivo y cuenta con una considerable comunidad de fans.
Un considerable tiempo después, y tras su paso por la consola de Microsoft, los chicos de Tantalus Media nos ofrecen un port para PlayStation 4 de la obra del estudio Colossal Order, responsable de otros títulos de gestión como Cities in Motion y Cities in Motion 2. No obstante, no ha sido hasta la llegada de este Cities Skylines cuando los finlandeses demostraron de lo que realmente eran capaces, convirtiéndose éste en su indiscutible opera magna (por el momento al menos). La adaptación que nos ha llegado hoy promete estar también a la altura de las circunstancias, teniendo que lidiar para ello con la difícil adaptación de un título de estas características a los controles de consolas.
Sin más preámbulos, pongamos la primera piedra
Sobra decir que en Cities Skylines tendremos la oportunidad de colocarnos la banda de “alcalde” para construir una ciudad desde sus mismos cimientos. En primer lugar, deberemos establecer una eficaz y muy sencilla red de carreteras, así como asegurar el suministro eléctrico y de agua potable (tampoco debemos olvidar la eliminación de aguas residuales, por supuesto) para la que, en el futuro, será una ciudad en toda regla. Estos sencillos pasos pueden parecer de lo más corrientes y esperables; sin embargo, solamente esconden el muy completo nivel de gestión que deberemos tener en cuenta a la hora de afrontar una simple partida en la obra que nos acerca Koch Media.
Puede parecer que hemos comenzado el análisis de una forma muy brusca, pero nos ha parecido lo más indicado a la hora de hablar del título de los finlandeses, pues éste también comienza sin ofrecernos ningún tipo de preámbulo como una posible historia o, por lo menos, un pequeño tutorial que nos guie durante los primeros pasos que daremos en un título de la complejidad como se presupone en el género que nos ocupa. Sin embargo, y aunque no podamos decir que no echamos de menos un breve tutorial que ayude a los no muy experimentados en juegos de esta índole, Cities Skylines ofrece unas mecánicas y menús envidiablemente sencillos y muy amistosos para cualquier tipo de jugador. No hay que confundir este indiscutible triunfo por parte de los desarrolladores (que, cabe subrayar, es una de las mejores cualidades con las que cuenta el juego) con la falta de profundidad a la hora de gestionar todo cuanto acontece en la ciudad.
Y es que la ciudad, y su gestión, cuentan con un elevadísimo grado de profundidad: el sistema de tuberías o el eléctrico ya mencionados, la gestión de basura, el transporte público o la seguridad por parte del cuerpo de bomberos o de policía son solamente una pequeña parte de la abrumadora cantidad de posibilidades de gestión que nos ofrece Cities Skylines. Aunque esto pueda ser dado por supuesto en cualquier título del género, el que nos ocupa hoy cumple de una forma más que notable, ofreciendo además una interfaz amigable e intuitiva (reciclada de la versión lanzada para Xbox One) que nos permitirá controlarlo todo de una forma muy cómoda. De nuevo sobra decirlo, pero este suele ser uno de los mayores problemas a los que se enfrenta un estudio que adapta un juego de gestión a los controles de consola, y el trabajo de Tantalus Media en este aspecto es digno de alabanza. No podemos obviar, sin embargo, que el control que nos ofrece el stick del DualShock 4 es más lento y menos preciso que el de un ratón y teclado. No obstante, no tardaremos mucho en hacernos con él, consiguiendo rápidamente un manejo de lo más fluido.
Volvemos a centrarnos en la gestión del título, y más concretamente en la importancia que tendrá en ésta el dinero y el crecimiento de la ciudad. El primero de estos aspectos será muy restrictivo a la hora de crear nuestra ciudad desde sus inicios, marcando el ritmo de crecimiento de ésta durante sus primeros momentos. El crecimiento de nuestra ciudad irá desbloqueándonos de forma escalonada nuevos edificios, servicios y posibilidades que brindar a los habitantes de vuestra propia Autumnfield (nombre que le hemos conferido a la ciudad que protagoniza este análisis y que nos parece más estúpido cada vez que lo volvemos a releer). A medida que la ciudad crezca se irá incrementando también el rango de dinero disponible (sacado de los impuestos generados por la misma) y el de crecimiento, perdiendo así la posible sensación de repetitividad que puede aparecer al inicio de la partida en pos de una mayor atención a mejorar lo ya construido y a seguir construyendo cada vez más y más (hasta límites que realmente son abrumadores).
Otros que ocuparán necesariamente nuestra atención serán los habitantes de la ciudad, que como no podía ser de otra manera cuentan con sus propias necesidades y opiniones acerca de prácticamente todo. El método que tendremos a nuestra disposición para escuchar las vocecitas de éstos será el de una red social muy inspirada en Twitter, algo que de nuevo se convierte en un añadido excelente ofreciéndonos una experiencia, en su justa medida, realista de una forma intuitiva y realmente cómoda. Esto se consigue mucho mejor, todo sea dicho, en la versión de PC de Cities Skylines, teniendo que conformarnos con una interfaz mucho menos inspirada para esta característica en las versiones de consola, aunque así pierda toda la personalidad que ofrecía la del juego original (convirtiendo esta función en una simple barra superior en la que aparecen las opiniones de los ciudadanos).
Continuamos hablando con los habitantes de nuestra ciudad para echarle en cara otro de los aspectos negativos con los que cuenta el título: la IA de éstos. Este es un aspecto del juego que, a priori, puede no parecer demasiado importante; sin embargo, a medida que avancemos en la partida y hagamos crecer la ciudad se convertirá en uno de nuestros mayores enemigos. Su aliado será el del tráfico y lo utilizará para sacarnos de quicio mientras pensamos en posibles mejoras para nuestra red de carreteras, mientras los ciudadanos optarán siempre por el camino más corto (sin tener en cuenta en absoluto que tengan otras infinitas posibilidades con mucho menos tráfico y por lo tanto más rápidas).
Terminamos este largo apartado en el que os hemos hablado principalmente sobre la jugabilidad de Cities Skylines para hablar de los DLCs que muy probablemente llegarán también a nuestras PlayStation 4 en el futuro. En estos momentos, el título cuenta (en PC) con una muy considerable cantidad de DLCs que llegan hasta los 15€ de precio aproximadamente, ofreciendo a cambio contenido de todo tipo (en algunas ocasiones realmente insuficiente a nuestro parecer) que nos permitirá expandir la experiencia de juego. La versión de la sobremesa de Sony trae consigo ya uno de los primeros: After Dark; sin embargo, nos hubiese gustado que por el precio de 39,99€ al que sale a la venta, ésta nos ofreciese algún otro incentivo (o que por un precio algo superior se nos ofreciese la posibilidad de conseguir el juego junto a varios de ellos). Estos posibles micropagos pueden no ser algo negativo per se, pues, aunque puedan llegar a parecernos algo más caros de lo debido también pueden convertirse en un verdadero incentivo para que los desarrolladores continúen ofreciendo soporte al título en lugar de sacar una segunda parte temprana y muy parecida a esta primera, algo demasiado habitual a día de hoy en el mundo de los videojuegos.
Cuando el nombre de Cities Skylines cobra su verdadero significado
En cuanto al apartado técnico que nos presenta el título de Colossal Order, solamente podemos decir que nos permite comprobar hasta dónde puede llegar el motor gráfico Unity si los que hacen uso de él demuestran no solo experiencia y ambición, sino también una gran pasión. La atención al detalle en el título de los finlandeses es realmente abrumadora, ofreciéndonos la posibilidad de continuar sorprendiéndonos con algo nuevo por mucho tiempo que hayamos dedicado al juego.
Los efectos gráficos como la iluminación y las texturas nos ofrecen estampas únicas y realmente bellas que, desgraciadamente, llegan a quedar algo ensombrecidas cuando hacemos el uso del zoom para acercarnos y ver todo lo más cerca posible. Es entonces cuando comenzamos a ver las costuras de algunas texturas que dejan mucho que desear, así como algún que otro bajón de frames y popping a corta distancia. Como decimos, estos errores se encuentran en el juego dejando en evidencia la versión de consolas de Cities Skylines. Sin embargo, serán prácticamente invisibles durante la mayor parte de nuestras partidas al desarrollarse éstas de forma mucho más cómoda desde una considerable distancia del suelo. También debemos subrayar que hemos probado el título desde una PlayStation 4 estándar, por lo que solamente podemos suponer que la versión Pro de la consola adolecerá en menor medida de estos fallos.
El aspecto sonoro, por su lado, cumple más que sobradamente con lo que se espera de un título de este género. Éste nos permitirá disfrutar de una gran inmersión nos encontremos donde nos encontremos gestionando o, simplemente, contemplando cómo nuestra ciudad crece edificio a edificio. De nuevo cabe resaltar el estupendo trabajo realizado por los chicos de Colossal Order. Un pequeño ejemplo que nos ayuda a imaginar el esfuerzo que los desarrolladores han dedicado a este aspecto del juego es que simplemente escuchando de cerca nuestra ciudad podremos saber si nos encontramos sobre una aún pequeña ciudad, sobre una zona industrial o sobre una gigantesca metrópoli.
La nota discordante la ofrece la Banda Sonora del título, que no llega a ofrecernos una melodía o canción verdaderamente representativa, limitándose a cumplir (de una forma más que correcta, eso sí) con lo que se espera de ella: que ambiente nuestras partidas en un demasiado cómodo segundo plano.
Conclusión
Cities Skylines es una estupenda propuesta con la que es fácil iniciarse en la construcción y gestión de ciudades. El título ofrece muchísimas posibilidades, que se verán además incrementadas con la prácticamente segura llegada de sus múltiples DLCs, que maravillarán también a los jugadores más experimentados en el género. Aunque la versión para PlayStation 4 presenta algunos decepcionantes errores que pueden ensombrecer la experiencia en cierta medida, los muchísimos pros con los que cuenta el juego lo convierten en una propuesta muy a tener en cuenta para todos los amantes del género, así como para el resto de jugadores que deseen introducirse en este apasionante género.
Conclusión
Jugabilidad - 84%
Gráficos - 74%
Sonido - 79%
79%
Cities Skylines es una estupenda propuesta con la que es fácil iniciarse en la construcción y gestión de ciudades. El título ofrece muchísimas posibilidades, que se verán además incrementadas con la prácticamente segura llegada de sus múltiples DLCs, que maravillarán también a los jugadores más experimentados en el género. Aunque la versión para PlayStation 4 presenta algunos decepcionantes errores que pueden ensombrecer la experiencia en cierta medida, los muchísimos pros con los que cuenta el juego lo convierten en una propuesta muy a tener en cuenta para todos los amantes del género.
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