Acaban de darse a conocer los datos de la última Encuesta de Población Activa, correspondientes al segundo trimestre de 2020, que realiza el Instituto Nacional de Estadística. Y las cifras de esta última oleada, que abarca casi por completo el estado de alarma decretado por la crisis sanitaria, hablan de la en estos tres meses.
Para “los datos de la EPA de hoy confirman que la recuperación del empleo y de la economía va a ser lenta. En el tercer trimestre de 2020 puede esperarse que la tasa de paro aun suba un par de décimas, hasta alcanzar el 15,5%, aunque también se reduce apreciablemente el número de afectados por ERTEs, que descienden desde los 3,4 millones contabilizados a finales de abril a 3,0 millones en mayo y 1,8 millones al cierre de junio”.
“Los ERTEs por fuerza mayor están prorrogados hasta el 30 de septiembre. Así, los datos del tercer trimestre también estarán afectados por ese motivo, aunque en una medida difícil de anticipar. Con la cautela que exige tal situación, en el tercer trimestre de 2020, el número de ocupados bajaría en 1,2 millones de personas (-6,1% interanual). La cantidad de parados subiría hasta los 3,4 millones (unos 200.000 más que un año antes; +6,4%) y la tasa de paro se situaría en el 15,5%, 1,6 puntos porcentuales por encima que en el mismo trimestre de 2019”, aventura Blasco.
“No obstante, a pesar de las malas cifras de la esta encuesta, el 4 de agosto analizaremos cómo evolucionan las cifras reales de afiliación, paro y contratación. En los últimos meses, el número de contratos creció un 26% en mayo y un 36% en junio, la afiliación también creció ligeramente, aunque con ciertos altibajos y se recuperaron muchos trabajadores de los ERTEs”, avanza Blasco.
Por último, el director del Adecco Group Institute insiste en que: “es crítico hacer un plan segmentado para los sectores más afectados por la crisis, con la prolongación de los ERTEs, las ayudas directas, y minimizando las cargas a las empresas y empleadores que gravan la creación y el mantenimiento del empleo (impuestos y cotizaciones a la Seguridad Social). También son esenciales las políticas activas de empleo y la colaboración público-privada, ya que nuevamente son los colectivos más vulnerables (jóvenes, mujeres, personas con capacidades distintas) los que sufren con mayor severidad la crisis económica”.
En el mismo sentido Blasco añade que “son imprescindibles dentro de estas políticas, aquéllas orientadas a la formación profesional, a la recualificación y la reorientación a aquellas profesiones y sectores que están creando empleo, dando una importancia alta a las habilidades y a las competencias digitales. Y finalmente, para garantizar los ingresos públicos y la sostenibilidad de la economía, debe potenciarse una regulación que favorezca la flexibilidad en el empleo y la actividad productiva, como garantía de viabilidad y competitividad, evitando además que ante la crisis crezca la economía sumergida”.
Datos más destacados
Como ya ha dado a conocer el Instituto Nacional de Estadística, el número de parados registrados es de 3.368.000 a finales de junio, su mayor cifra desde el segundo trimestre de 2018, mientras que el número de ocupados bajó hasta 18.607.200 personas, el menor desde el primer trimestre de 2017. Pero la EPA también señala que aquí no se incluyen los afectados por ERTEs, y que la cifra de inactivos se sitúa en máximos - 17.588.700 personas- ya que muchos desempleados no se han podido clasificar como tales sino como inactivos (por la propia definición que existe dentro de la terminología de la Encuesta de Población Activa).
Así, en el segundo trimestre de 2020 -que abarca casi la totalidad del estado de alarma- el paro subió en 55.000 personas, lo que supone un 1,6% más que en el trimestre anterior, y la ocupación disminuyó en 1.074.000 puestos de trabajo (-5,4%), su mayor retroceso desde que se tienen datos.
La tasa de paro subió hasta el 15,3%, 1,3 puntos porcentuales más alta que hace un año. Es la primera subida interanual desde el año 2013. La proporción de parados subió para ambos sexos y más fuertemente entre los menores de 40 años. La tasa de paro creció en todas las autonomías. Ahora, las más altas corresponden a Canarias (21,6%) y Extremadura (21,4%), mientras que las más reducidas son las de Navarra, La Rioja (10,1% en ambos casos) y País Vasco (9,1%).
Además, el número de asalariados se redujo en el segundo trimestre en 1.033.300 personas (-6,3%), de los cuales 671.900 tenían un contrato temporal (-16,2%) y 361.900 un contrato indefinido (-2,9%). También baja el número de autónomos. Solo se encuentra un incremento del empleo entre las personas de 60 y más años de edad.
Para más información, está disponible el webinar con la presentación de estos datos y previsiones para la próxima EPA: https://www.youtube.com/watch?v=aAdQ-DPM0rU