Analisis del Motorola Moto X Style con Android 6.0

Como todos conocemos ya, Motorola hizo este año una división en su gama alta, lanzando dos terminales en vez de uno como nos tenía acostumbrados. Por un lado tenemos el Moto X Play, que ya analizamos hace un tiempo, y por otro el que tenemos ahora mismo entre manos, el Motorola Moto X Style. Aunque hace poco han lanzado al mercado una nueva variante de este que es el Moto X Force, del que aseguran que tiene una pantalla irrompible.

Como siempre vamos a empezar hablando del exterior del dispositivo y de su diseño. Nos encontramos con un terminal bastante grande y cuenta con unas dimensiones de 15.3 centímetros de alto, 7.6 centímetros de ancho y 11 milímetros de grosor, su peso es también algo elevado ya que llegamos hasta los 180 gramos. Son unas dimensiones y un peso como ya hemos comentado bastante elevado pero como siempre, Motorola nos ofrece una ergonomía diferencial al resto de los dispositivos. Personalmente he estado usando este terminal durante una semana y si bien al principio se me hizo algo grande respecto a mi terminal habitual (Xperia Z3), pronto te acostumbras a él y no resulta para nada pesado en el uso diario.

En cuanto al diseño, Motorola sigue con su estilo propio. En la parte trasera nos encontramos una curvatura que hace que se adapte muy bien a la mano, junto a su cámara, flash dual y la hendidura con el logotipo de Motorola que ya es habitual. En su parte frontal contamos con un doble altavoz que ya es tradicional, cámara delantera, Flash LED y diferentes sensores.

Si pasamos al lateral derecho nos encontramos con el control de volumen y el botón de encendido y apagado. Este último con un pequeño rallado que hace que se diferencie bastante bien. El canto derecho está totalmente liso, mientras que en su parte superior está ubicada la ranura para la tarjeta NanoSim y MicroSD junto al Jack de 3.5. Para finalizar y como era de esperar, en la parte inferior nos encontramos con el conector MicroUSB.

Un detalle importante de este terminal es que es resistente a salpicaduras gracias a la protección IP52, que no sumergible, por lo que si llueve no debemos de preocuparnos en exceso.

Vamos ahora a conocer las tripas de este Moto X Style, donde nos encontramos con lo que casi todo el mundo espera. Su procesador es el SnapDragon 808 acompañado de la Adreno 418 y 3GB de RAM DDR3 y 3 versiones diferentes de almacenamiento (16, 32 y 64) que podremos complementar con tarjetas MicroSD como ya hemos comentado antes.

Pasando al apartado multimedia, nos encontramos con una pantalla IPS de 5.7” con resolución QuadHD y 515 pixeles por pulgada. Una pantalla bastante buena, que no nos defraudara, aunque podrían haber mejorado los ángulos de visión. Un frontal muy bien aprovechado, con unos marcos mínimos y protegida por Gorilla Glass 3. Respecto al audio, bajo mi humilde punto de vista, diría que simplemente brutal. Se escucha alto y con calidad. Os dejamos con un video para que lo comprobéis por vosotros mismos.

Pero todo esto que hemos comentado no serviría de nada si no viene acompañado de una buena batería que nos permita despegarnos del cargador. Motorola ha incluido una batería de 3.000 miliamperios, que sin duda, nos durará el día entero sin mucho problema, además, incorpora la ya tan famosa tecnología de carga rápida, que nos podría salvar de algún que otro apuro.

En el apartado del software, todos sabemos ya como lo suele hacer Motorola. Android Puro con 2 o 3 aplicaciones propias que realmente aportan valor. Unido a la política de actualizaciones que tiene la compañía lo hace uno de los primeros terminales en recibir las versiones más nuevas, y por ello es uno de los primeros que ha recibido Android 6.0 Marshmallow.

Para ver el rendimiento del terminal, nada mejor que ver el análisis en video que le hemos hecho al Moto X Style: