ANÁLISIS: Fat Princess Adventures

Si a un juego se le pide diversión, Fat Princess Adventures la ofrece y a raudales. Y es que el título llegó prácticamente de la nada, sin hacer ruidos por parte de la gente de Fun Bits Interactive y que se publicó en formato digital tras exponerlo en la Sony Experience de hace unas semanas.

ANÁLISIS

VERSIÓN DISPONIBLE

PS4

VERSIÓN ANALIZADA

PS4

DESARROLLADOR

FUN BITS INTERACTIVE

DISTRIBUIDOR

SONY

VALORACIÓN

8

NUESTRA FORMA DE VALORAR LOS JUEGOS

La historia de Fat Princess Adventures se resume en tener que salvar nada más u nada menos que a dos princesas de una mala malísima reina, en un mundo gordito y tan gore como tierno.

Fat Princess Adventures es un juego de rol de acción principalmente cooperativo aunque gracias a los comentarios de los enemigos y de nuestro personaje. Salvando las distancias, y muchísimo, un juego tipo Diablo para que la gente se haga una referencia.

La mecánica de juegos nos obliga a explorar eliminando el máximo número posible de enemigos y recogiendo objetos. Para ello tenemos cuatro tipos de clases de personajes que son el guerrero, el mago, el ingeniero y el arquero. Cada uno cuenta con un arma especial, un arma secundaria, un complemento para la cabeza y traje. Cada objeto nombrado es único e intransferible. Destacamos que esta clase no nos la dan a elegir en el principio el juego, sino que en los puntos de guardados que suelen estar repartidos de manera agradecida por el mapa, alteraremos a nuestro gusto y antojo los tipos de papel. Además, contamos con un herrero que será quien nos vaya mejorando todo el equipo a cambio del oro que vamos adquiriendo. Recuperar vida es tan sencillo como el hecho de ir comiendo los trozos de pasteles que van dejando algunos enemigos, pero si tenemos todos los corazones completos… háganlo y vean lo que os pasa por agonías. Al final de cada misión nos encontraremos con un jefe final y que para venderlo necesitaremos prácticamente la resolución de un puzle para localizar su punto débil.

Manejar a cuatro personajes no quiere decir que tengamos que adaptarnos a cuatro controles diferentes, ya que prácticamente, viene a ser lo mismo juguemos con el personaje que juguemos, por lo que aconsejamos cambiar el personaje para hacer unos combates menos aburridos y porque a veces la situación lo exigirá prácticamente de manera obligada

El juego está pensado para ser jugar con más jugadores o bien en modo online o bien local. Juguemos de una u otra manera, aconsejamos el estar comunicado de una u otra manera con el otro jugador ya que la diversión será mejor. Eso sí, la experiencia individual también se hace divertida y llevadera.

La duración no superará en ninguno de los casos las diez horas, por mucho que nos paremos y por muchos combates a los que nos enfrentemos, y es que Fat Pricess Adventures es a fin de cuentas un juego bastante lineal aunque podamos explorar un poco las distintas zonas del mapa.

Hora ya de hablar de ese apartado técnico que tanto nos ha gustado y nos ha sorprendido. Antes dijimos que el apartado visual era tan gore como tierno, y así lo es y os lo explicamos. Estética visual tipo cartoon en la que todo el mundo echa sangre por un tubo, enemigos con un diseño gracioso y tierno que van a por nosotros como si no hubiera un mañana, comentarios con un humor negro y ambiente macabro. Que no os engañe las imágenes del juego.

Las melodías del apartado sonoro, junto con un doblaje perfecto a nuestro idioma, hace del apartado visual un juego digno de ser mencionado no como referencia, sino como una parte atractiva del juego.

NUESTRA OPINIÓN FINAL

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Fat Princess Adventures es un juego que aunque se aleja de las otras entregas de la saga, el seguidor o incluso nuevos jugadores tienen aquí una oportunidad de lo más divertida que se recuerda. No vas a encontrar el mejor juego del género, ni una historia única, ni tampoco una mecánica que tenga el más mínimo aliciente para hincarle el diente, pero la totalidad del juego hace que Fat Princess Adventures sea un producto recomendable y que divertir, divierte por un tubo.

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