ANÁLISIS: Fist of the North Star Lost Paradise

SEGA está dándolo todo en los últimos años por traernos a nuestras tierras aventuras tremendamente orientales que hace años no solían ni aparecer por estos lugares. Y es que desde que llegara con mucha aceptación los primeros Yakuza a nuestras tierras la cosa ha ido creciendo exponencialmente hasta terminar topándonos con juegos tan variopintos como este Fist of the North Star: Lost Paradise.

Un juego muy de nicho, especialmente hecho para los fans del manga, pero que llega con un buen potencial y un más que correcto acabado para intentar a base de golpes entrar en las casa de todos los poseedores de una PlayStation 4 de la cual es exclusivo.

ANÁLISIS

VERSIÓN DISPONIBLE

PS4

VERSIÓN ANALIZADA

PS4

DESARROLLADOR

SEGA

DISTRIBUIDOR

SEGA

VALORACIÓN

7’5

NUESTRA FORMA DE VALORAR LOS JUEGOS

Como concepto general del juego, deciros que nos encontramos ante un juego de acción en tercera persona con mucha acción, y donde los toques de musou serán la marca principal de la casa. Así que preparaos tanto para explorar grandes zonas, como para que cuando lleguemos a ciertos lugares nos encontremos con grandes hordas de enemigos que machacar… porque la verdad si hay algo que haremos en este juego es el machacar y machacar matones muy hormonados.

Un mundo bien realizado, con muchas cosas que hacer, además de machacar malotes. Y es que Lost Paradise nos permite realizar una buena cantidad de misiones de todos los tipos y sentidos, yendo desde sencillos mandados, pasando por autenticas cacerías, hasta llegar a minijuegos que nos reportaran benefícianos económicos. Eso sí, por desgracia nos gustaría que la parte de desierto del juego hubiese tenido algo más de vida y sentido, ya que la vemos algo desangelada y con poco que hacer por ella, más allá de alguna misión secundaria o alguna recolección de materiales.

Como punto álgido del juego nos encontramos ante su sistema de combate. Un concepto muy básico a la vez que entretenido, que supone un frentismo y una diversión que parece increíble que sea tanta con tan poco. Y es que nos encontramos con dos tipos de ataques a lo que se une un sistema de esquiva, que se pueden combinar con mucha agilidad y precisión. A ello hay que unirle un sistema de concentración de energía que podrá ser utilizado en momentos determinados y que demuestra un nivel de destrucción sin parangón en nuestro personaje, sacando con ello la vena más gore y alocada de un juego lleno de sangre y violencia por cada rincón.

Por lo que se refiere a los enemigos, nos encontramos ante “una manada de pollos” algo descabezados, y es que no  sobresalen por su inteligencia la verdad. Y es que nos enfrentamos a un ejército de seres clónicos, donde más allá de algunas armas y estructuras corporales supondrá una diferenciación entre ellos.

Siguiendo con el tema de la lucha y de nuestro propio personajes hay que contar que el juego posee un sistema de progresión bastante interesante. Por un lado está el de ir mejorando nuestro sistema de lucha, con mejoras tanto en defensa como en ataque que nos harán más variados y potente dentro de la batalla. Y por otro lado un sistema de experiencia con niveles donde podremos ir avanzando en un tablero más características personales e incluso equipamientos.

Por otro lado hay que decir que el juego tiene una variación de horas muy grandes dependiendo de si nos centramos en la historia principal o si tiramos de universo y queremos recorrer hasta el último rincón, pasando por ello de una quincena de horas a un centenar.

En lo que se refiere a la historia del juego. Deciros que nos encontramos en el mismo universo, e incluso no muy lejos del hilo argumental del manga original. Una historia en el que nuestro prota Kenshiro se meterá de lleno en la violenta aventura de encontrar a su amada Yuria, de la que se cuenta que hay noticias y visualizaciones de ellas por una fortificada ciudad llama Eden, la cual como sucede en todo el juego es una de las grandes urbes de un universo totalmente postapocaliptico llevado de una forma bastante original y divertida. Y en el que la historia principal no solo nos hace interesarnos por el personaje y sus aventuras, sino que incluso nos dará a conocer mucho más a este y a todo lo que le viene rodeando desde hace mucho tiempo.

Entrando ya en la parte gráfica, nos encontramos ante un juego que tiene muchos altibajos a nivel de acabado visual. Y es que pese a que todo tiene un diseño artístico exactamente igual al manga. Hay que decir, que el juego pasa de diseño de personajes muy bien tratados, a zonas pobladas con detalles y vida, hasta llegar al desierto donde la cosa está totalmente descuidada y falta de detalles.

Eso sí, todo se mueve de una manera muy estable pese a la cantidad de objetos que hay en pantalla, con alta definición, y con unos bien llevados especialmente efectos de luz.

En lo que se refiere a la parte sonora, hay que empezar hablando de la buena parte musical del juego, con temas muy rockeros que aumentan nuestra adrenalina a cada momento. Por otro lado el sonido ambiente y los efectos sonoros son contundentes y bien implementados. Y por último hay que hablar de que nos llega a nuestra tierras doblado al japonés e inglés, con por desgracia textos solamente en ingles, y os aseguramos que hay mucho texto.

NUESTRA OPINIÓN FINAL

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En conclusión, ya solo nos queda deciros que nos encontramos ante un buen juego de acción de mundo abierto con toques de musou que agradará especialmente a los grandes seguidores de este universo postapocaliptico que tanto es capaz de dar de sí dentro del juego.Eso sí, hay que reconocer que es un juego con carencias y cosas que mejorar, pero que por otro lado se hace tremendamente divertido e incluso apasionante por momentos.

Así que amantes de este manga, ya no tenéis escusa para disfrutar de vuestro personajes preferido en una de las experiencia con esta franquicia que mejor se han hecho en toda la historia.

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