ANÁLISIS: Last day of june

El estudio italiano indie Ovosonico, junto al sello de distribución de 505 Games regresan con una nueva aventura interactiva tras su maravilloso Murasaki Baby. Y regresan de nuevo con uno de esos juegos que primeramente nos entran por los ojos, para continuar entrándonos por todo el resto de los sentidos hasta llegar al corazón. Y es que nos encontramos ante uno de esos juegos intimistas, particulares y emocionantes. Que consiguen trasmitir y demostrar la capacidad narrativa del medio jugando con los sentimientos del jugador.

Una aventura que nos ha gustado, nos ha impactado, y nos ha dejado con más ganas de esta tipología de juego que no se dan tan a menudo, pero que cuando lo hacen nos dejan marcado nuestro corazón gamer.

Así que atentos a las siguientes líneas, ya que vamos a intentaros abrir nuestros sentimientos, ya que no es un análisis que se haga con el mando o el teclado, se hace con el corazón.

ANÁLISIS

VERSIÓN DISPONIBLE

PS4 – PC

VERSIÓN ANALIZADA

PC

DESARROLLADOR

OVOSONICO

DISTRIBUIDOR

505 GAMES

VALORACIÓN

8’5

NUESTRA FORMA DE VALORAR LOS JUEGOS

Sin lugar a duda, y sin pensárnoslo mucho, no nos queda otra que empezar hablando del punto más importante de este juego… la narrativa. Y es que nos encontramos ante un juego que pese a estar diseñado como un juego de exploración y puzles como si de una aventura gráfica se tratase, hay que reconocer que estos son tan minuciosos y sencillos que nos sirvan más como hilo conductor de la propia historia que como jugabilidad en sí.

Y es que Last Day of June, es uno de esos juegos que nos emocionan, que nos hacen sentir cantidad de sensaciones, y ante todo es un juego que es capaz de trasmitir como pocos lo hacen, siendo una de las experiencias narrativas mejor llevadas y más potentes de los últimos años. No siendo muy aconsejable para corazones sensible, ya que esta nos cuenta como una situación dramática en una feliz pareja consigue hacernos luchar por cambiarlo todo, y que un fatal y trágico desenlace termine por no darse.

Una historia difícil de digerir, pero perfectamente contada gracias no solo a el maravilloso guión que hace fluir todo, si no a la propia capacidad expresiva de todo lo que nos rodea. Demostrando claramente dos puntos; la no necesidad de ni la más mínima palabra para darnos una historia muy profunda. Y por otro lado, esa sensación de encontrarnos ante lo que todos llamamos el Lenguaje del Videojuego… es decir, esa capacidad que solo un medio tiene para contarnos algo con todas sus posibilidades expresivas y matices, y que sin dudarlo es uno de los grandes ejemplos.

Por desgracia nos encantaría comentaros cantidad de detalles de la historia, poder discernir sobre ellos, y saber qué conclusiones hemos llegado a tomar, pero sería destriparos una de esas historias que en las no más de cuatro horas que dura consiguen trasmitir lo que pocas consiguen.

Como ya os hemos dicho, el juego además de la importancia narrativa, lo forma una pequeña parte de exploración a la que se le integran perfectamente unos puzles que nos han gustado por si integración con la historia y el escenario, pero que como decimos no suponen apenas un reto.

En la exploración si hay que decir que pese a no sé un escenario demasiado grande, si que tiene un encanto especial, que nos lleva no solo a explorarlo todo, si no a buscar hasta algún secreto que le da un poco más de vida al juego, y que os aseguramos que tiene unos extras que nos gustarán poder ver.

Por lo que respecta, el control es bastante simple. Estando básicamente formado por las teclas o stick de movimiento, y un par de botones de acción, los cuales se nos irán mostrando en pantalla cual usar en cada momento. Sencillo pero efectivo dentro de la tipología de juego con la que nos encontramos.

Uno de los puntos algo oscuros son los tiempos de carga. Y es que no solo es que tarde algo más de la cuenta, sino que además nos encontramos con más de la cuenta. Así que tened paciencia por que cortan un poco la experiencia.

En definitiva un apartado jugable donde nos da más la sensación de encontrarnos ante una historia interactiva que ante un videojuego común, pero os aseguramos que merece la pena perder un poco esa parte conceptual de videojuego, para dárselo a ese poderío narrativo.

Eso sí, ese poderío narrativo que tanto os hablamos, no puede ser lo que es sin el precioso apartado técnico que posee el juego.

Empezando por la parte gráfica, lo primero que se nos viene a las pupilas, es el maravilloso estilo gráfico en general, le cual nos recuerda a una gran acuarela en movimiento, donde los efectos de luces y partículas le dan una vida espectacular. A ello hay que añadirle un diseño tremendamente original de los personajes. Los cuales se representan mediante humanos algo deformes y sin ojos, que pese a parecer raros los primeros instantes terminan por ser entrañables.

Por otro lado, la parte sonora nos ha sorprendido no solo por lo bien implementada que está, si no por el buen trabajo de ambientación y lenguaje que se ha realizado.

Empezando con la banda sonora, deciros que esta es sin lugar a duda parte importante en la narración, ya que se intercala e implementa perfectamente en cada momento, dando ese toque emocional que todo ello necesita. Y a todo esto se le une un maravilloso trabajo de doblaje, donde ponemos sobre la mesa un idioma inventado que demuestra cómo es capaz de decir tanto sin una sola palabra entendible. Sencillamente genial.

NUESTRA OPINIÓN FINAL

-

En conclusión. Pese a la simpleza en algunos apartados del juego, no nos queda otra que destacar este Last Day of June, como uno de los indies más interesantes del año. Y es que es de esas experiencias que no nos esperamos, y que consiguen llegar muy hondo. Y a la que se le une un precioso diseño artístico, un apartado sonoro muy bello, y ante todo, unas capacidades narrativas tan especiales y bien llevadas que nos dejarán sin aliento a lo largo y ancho que esta pequeña y preciosa aventura que los amigos italianos de Ovosonico nos han dado.

-