ANÁLISIS: Like a Dragon Ishin!

Un Yakuza de lo más tradicional

El universo de Yakuza es uno de los más grandes y apasionantes que han dado las tierras orientales en los últimos años. Teniendo en los últimos años una carga dentro del sector realmente potente, lo que ha hecho que mucho público que tenía miedo a ellos se haya terminado acercando, cosa que temas como su traducción al español ha tenido mucha culpa.

Por eso, cada vez que se anuncia una nueva experiencia de estos bajos fondos, ciertamente uno queda deseoso de ver que nos presenta y representa una nueva aventura. Eso sí, aquí nos encontramos con ciertos matices, ya que pese a todas las mejoras, estamos hablando de un juego que tiene ya unos años, que nunca había salido de Japón, y que viendo el tirón de Like a Dragon , ha terminado por salir por estos lares para gusto y disfrute de los seguidores de la franquicia, y la verdad que ha merecido mucho la pena esta nueva sorpresa en forma de spin off que sigue poniendo muy arriba está genial saga.

Y es que Like a Dragon Ishin!, nos traslada a mediados del siglo diecinueve. En una de esas historias que tiene una clara tendencia tradicional. Donde el comienzo de cierta apertura al mundo hace mella en una cultura realmente cerrada y aislada, pero que será la base y veremos reflejadas en futuras tendencia y formas de actuar de los japoneses en general, y de la yakuza en particular. Y que puede ser una genial puerta de acceso a este concepto, para los que quieran adentrarse en un mundo de honor, samuráis y shoguns. Cosa para nada sencilla de entender desde nuestro occidentales ojos, pero que nos hacen comprender, con ciertos matices, un momento histórico realmente importante en la historia de Japón.

Todo ello para llevarnos a la historia de Ryoma, en busca del que fuese el asesino de su adoptivo padre. Para lo cual entra a formar parte de una particular y policial fuerza del estado. Que le abrirá la puerta a cantidad de pistas con la que conseguir su vengativo objetivo. En la que un protagonista con una personalidad muy particular a causa de una dura vida, y las injusticias de la época, terminan forjando un personaje lleno de matices que os aseguro que os va a marcar.

Entrando ya en el juego. Lo primero que tengo que hablaros es que el juego se concibe con la estructura clásica de todos los Yakuza, es decir, un mundo abierto no muy grande. Donde un cúmulo de actividades, misiones y personajes, se irán reuniendo entre sí para forjar una interesante base narrativa y jugable, que es capaz de dar sentido y cohesión a una época y un lugar lleno de actividades, que pueden ir desde las más sencillas y tradicionales, a grandes misiones casi de interés nacional. Siendo verdaderamente curioso como no deja ningún estrato social sin tocar en sus más de treinta horas de juego que podremos tardar si nos dejamos absorber.

Todo ello se acompaña por un diseño de mapeados de lo mejor que me he encontrado dentro de la saga. Con zonas muy disfrutables y llenas de detalles, que seguramente nos hagan pasar horas y horas por sus callejuelas o lugares más recónditos, entre misiones, minijuegos y peleas.

Más allá del trato del mundo y su importante base narrativa. El juego nos acerca al concepto de acción más clásico. En el que podremos elegir entre d iferentes estilos de lucha, que nos llevan desde la utilización de artes marciales hasta nuestra amada katana. Aunque como curiosidad comienza a hacer las aparición de las primeras armas de fuego. Y aunque no sobresalen por su potencia, si somos de los que la usaremos, nos pueden ser de mucha utilidad.

Como curiosidad, dentro de este activo mundo. Deciros que se han incluido cantidad de pequeñas misiones y minijuegos. Algunos de ellos tradicionalmente absurdos, que os aseguro que vais a querer probar, aunque sean algunas partidas. Pero ante todo tengo que destacar uno de ellos, en el que se ha incluido un sistema de mazmorreo y cartas, realmente bien creado. Donde la estrategia y la potenciación de ellas, van a ser casi de este un juego paralelo.

Hay que decir que el juego se controla con soltura, pese a notarse sus bases jugables más clásicas, y con ello algo más de dureza y falta de precisión de lo que nos tiene acostumbrada las entregas más actuales. Consiguiendo implementar un combate muy interesante en cuanto al sistema de combos y remates. Con una gran importancia en cuanto al sistema de bloqueos y esquivas. Y con la necesidad de saber adaptarnos a cada situación y estilo de lucha que nos sea más beneficioso en cada momento. Entrando aquí una buena cantidad y calidad en lo que a enemigos se refiere. Armados y especializados de diferentes formas y tipos de combate, a los que tendremos que saber adaptarnos.

Aquí entran ciertos tintes roleros. Basándose principalmente en dos partes. Por un lado, las mejoras que podremos ir realizando a partir de unas orbes y un tablero. Donde la inclusión de nuevas habilidades, nos abrirá la puertas de mezclas y posibilidades realmente curiosas. Y por otro lado; la potenciación, mejora, recolección de productos o forjados, que nos hagan perfeccionar o crear nuevos equipamientos que nos hacen mejorar como guerrero e incluso como persona. Y donde la exploración y el realizar todo tipo de misiones será de gran ayuda.

Un apartado jugable que engancha cantidad. Que te crea curiosidad por saber que hay unos pasos más allá. Que te incita a conocer a sus gentes y sus tradiciones. Y que no para en ningún momento de ofrecerte misiones, minijuegos y conversaciones de lo más curiosas. Por lo que caer dentro de esta época nipona va a ser toda una delicia.

APARTADO TÉCNICO GRÁFICO

Desde el punto de vista técnico, y pese a sus mejoras debido al cambio de motor gráfico, hay que reconocer que no llega a la altura de los otros juegos de la saga. Y con ello no estoy poniendo mal este apartado, ya que por ejemplo consigue representar a la perfección unos decorados verdaderamente bonitos, exponer un buen trabajo en sus texturas, y una inclusión de efectos lumínicos que le da mucha vida. Eso sí, los personajes pese a alcanzar un buen nivel, se resienten en las animaciones y expresiones faciales, por lo que habrá que perdonarle ese tiempo que carga a sus espaldas.

SONIDO

La parte sonora tiene que ser resaltada con fuerza. Y es que nos encontramos ante un juego realmente especial en cuanto a su ambientación. Todo ello acompañado de buenos efectos, preciosa musicalidad, y unas voces en japonés que terminan por meterte de lleno en la época y el lugar que quiere representar. Y ante todo, esa acertadísima traducción al español, que sin dudarlo lo hace mucho más accesible a muchos jugadores.