El Secretario de Estado Rex Tillerson habla el año pasado mientras el presidente Trump escucha durante una ceremonia de juramentación. (Jabin Botsford / The Washington Post)
Rex Tillerson se hizo oficialmente como secretario de Estado, pero se metió en lo que parecía ser una excavación final en el presidente Trump antes de salir por la puerta.
En el final de su discurso de despedida al Departamento de Estado el jueves, Tillerson habló sobre la importancia de mantener su integridad y respetar a los demás. Luego se dirigió a la política.
“Esta puede ser una ciudad muy mezquina”, dijo, dibujando risa y una ronda de aplausos, “pero no tienes que elegir participar en eso”. Cada uno de nosotros elige a la persona que queremos ser, y la forma en que queremos ser tratados, y la forma en que trataremos a los demás “.
Es virtualmente imposible no conectar estos comentarios con la expulsión de Tillerson. Lo despidieron a través de un tweet , y el oficial No. 4 del Departamento de Estado dijo que Tillerson no recibió notificación previa. Luego, en una reunión a puerta cerrada la semana pasada, el jefe de personal de la Casa Blanca, John F. Kelly, informó a los empleados que Tillerson recibió la noticia de su inminente salida mientras estaba en el baño . Kelly ha recibido muchas críticas por divulgar eso, incluso en privado.
Todo el episodio ha reforzado el hecho de que ir a trabajar en la administración de Trump a menudo significa revisar tu orgullo en la puerta . Pero Tillerson pareció sentirse particularmente conmocionado por todo el asunto, incluso en una breve declaración a la prensa después de su despido de la semana pasada en la que su voz tembló notablemente. Según los informes, Tillerson sintió que estaba haciendo grandes progresos como secretario de Estado justo antes de ser despedido.
Trump también contradijo repetidamente las cosas que Tillerson había dicho, incluso sobre si era prudente reunirse con el líder norcoreano Kim Jong Un (Trump anunció la reunión horas después de que Tillerson argumentara que no era prudente) y más ampliamente sobre si hablar con los norcoreanos era una buena idea Sugirió públicamente que Tillerson estaba perdiendo el tiempo. ” Ahorra tu energía, Rex “, twiteó Trump. “Haremos lo que tiene que hacerse”.
Tillerson puede argumentar que el comentario del jueves no estaba dirigido a Trump. Pero su ubicación al final de su discurso debe borrar cualquier noción de que sea una coincidencia, al igual que su alusión a cómo debería “tratar a los demás”. Tillerson fue tratado repetidamente con lo que parecía considerar (y lo que parecía desde el exterior) como una falta de respeto por Trump.
Y su mensaje público final como secretario de estado fue esencialmente este: no seas como el presidente Trump.
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https://www.washingtonpost.com/news/the-fix/wp/2018/03/22/rex-tillerson-takes-an-apparent-parting-shot-at-trump/