Análisis: Stick it to the Man!

Cab Analisis 2014 Stick to the Man

Desde las frías tierras nórdicas de Suecia llega a nuestro poder el desarrollo independiente del estudio Zoink!, el más que peculiar Stick It to the Man. Uno de esos juegos que no sabemos por donde nos va a salir, pero que el resultado final es algo creativo e inédito en su género. Y si además a todo esto le unimos toques de humor, y unos gráficos que no pasará desapercibidos, y no precisamente por lo espectacular, os podemos decir con total seguridad que este Stick It to the Man es un juego que cuanto menos os gustará probar, y si no os convencéis aún, pues seguid leyendo este análisis.

HISTORIA

La historia nos mete en la piel de Ray, una persona normal y corriente que trabaja como obrero, con su pasado del que veremos a lo largo de los diez capítulos los momentos más importantes.

Afortunadamente, nuestro protagonista siempre lleva el casco mientras trabaja para proteger su cabeza. Hasta que un día, algo caído desde el espacio le golpea en el casco y, por consecuencia de una lesión cerebral, le crece un espagueti con forma de mano llamado Ted, lo que resulta ser un poder que le dará la capacidad de leer las mentes de las personas.

Al principio Ted parece ser una alucinación de Ray, ya que Arlene, la novia de Ray, no puede apreciar a Ted, pero conforme pase el tiempo este se dará cuenta que Ted por desgracia no será una alucinación de Ray.

La historia nos hará viajar por esperpénticos y extraños lugares, como un manicomio, una cárcel, una cueva… e incluso estaremos dentro de los sueños de Ray para buscar la solución de sacar a Ted de su cuerpo, haciéndonos tanto viaje el dudar de si estamos en el sueño o en la realidad.

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JUGABILIDAD

Stick It to the Man nos propone un juego de scroll horizontal de plataformas unido con la aventura, ya que debemos avanzar corriendo y saltando en los diferentes niveles, manteniendo algunas esencias jugables que nos recordarán a esas aventuras que tan de moda estuvieron a finales de los 80’s principio de los 90’s.

El juego nos sitúa en un mundo imaginario de papel, formado por personas, y diferentes objetos, de los que los más relevantes serán con los que podemos interactuar de diferente manera, viniendo representados estos en forma de pegatina. Siendo la mayoría de estas pegatinas usadas de forma obligatoria en los lugares adecuados, mientras una minoría de estas, servirán para desbloquear diferentes trofeos y hacer misiones secundarias, llenas de diversión la gran mayoría.

En lo que al control se refiere, este es sencillo, además la respuesta es precisa y no presenta ninguna complicación. Los saltos que realizamos con Ray tienen un aterrizaje previsible y no nos jugará una mala pasada en los diferentes escenarios.

Entrando a conocer a nuestros enemigos, decir sobre ellos que poseen una inteligencia artificial notable, ya que cuando seamos visto vendrán a por nosotros de la forma más adecuada, anticipándose a nuestros caminos, por lo que nos es prácticamente imposible esquivarlos sin el uso de pegatinas trampas, como pueden ser unas que representan sueños o la cara de Ray (La más eficaz, ya que los compañeros del enemigo al que le pongamos esa pegatina irán a por él)

La duración nos parece idónea, aun que a algunos se os pueda hacer corta, pero no es necesario alargar una historia que no tiene más que contar y que podría acabar resultando pesada. Los diez capítulos, salvo un par de ello, son cortos y fáciles de superar.

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La dificultad no está muy presente a lo largo de la aventura, y dependerá en cierto modo de la capacidad que tenga cada jugador en asociar los mensajes de los personajes que nos vamos encontrando con las pegatinas objetos que vamos obteniendo, que no suele ser una asociación complicada. En caso de que no sepamos la combinación, la podremos comprobar de una en una sin repercusión negativa alguna.

En definitiva, un apartado jugable bastante variado, entretenido y bien llevado, que nos hará disfrutar la aventura de principio a fin en este tan particular mundo.

APARTADO TÉCNICO

Apartado Visual

En el apartado gráfico nos encontramos con un videojuego que deja de lado los gráficos asombrosos y pulidos, consiguiendo formar un entorno perfecto respecto a su jugabilidad con la sencillez y el buen acabado, ya que Stick It to the man presenta unos personajes y escenarios que vienen representados en forma de papel, sin apenas profundidad y con una estética divertida y en algunos casos algo tétrica e inquietante.

Pese a ello el conjunto final es de lo más llamativo, y ante todo no deja indiferente a nadie, ya que la originalidad de los diseños destaca por encima de cualquier potencial visual. stickit_screen1

Apartado Sonoro

Dentro del apartado sonoro hay que destacar la banda sonora. Esta encaja con la estética de todo lo que nos rodea, dándonos esas sensaciones de antigüedad y deterioro, con temas sacados del rock de mediados del siglo pasado.

Por otro lados las voces nos llegan en un completo ingles aunque con la ayuda de subtítulos al castellano, destacando también la perfecta sincronización de los movimiento bucal de los personajes, los que nos dará la sensación de están interpretando.

NUESTRA OPINIÓN FINAL

Stick It to the Man es un indie al que hay que darle sin dudarlo una oportunidad. Adictivo, con una duración apropiada y divertido. Y aunque no sea muy rejugable, esas horas que nos dará de diversión harán que lo recordemos mucho tiempo.

Stick It to the Man es uno de esos juegos que llegan sin hacer mucho ruido, pero que llegan para quedarse entre nosotros, y mostrar el potencial que posee esta desarrolladora sueca. En definitiva uno de los juegos independientes muy a tener en cuenta en este final de 2013.