Creo que nunca me había puesto a escribir un análisis con tantos interrogantes y sin tener bien claro que pensar de un juego. The Wonderful 101 es una de las exclusivas mas esperadas de Wii U, no es para menos. Nos encontramos ante un juego de autor, de estos que son capricho de una de esos geniales personajes de la industria, en este caso Kamiya de Platinum Games, y que difícilmente se le podía haber ocurrido a otra persona. La importancia del juego era tal que Nintendo, además de publicarlo, le dedico su propio Direct y todo... y en los propios Direct se veía que no iba a ser un juego para todo el mundo.
No se por donde empezar a hablaros de TW101, si por lo bueno o por lo malo... bueno, empecemos por lo malo. La obra de Kamiya tiene solo una cosa mala, pero es tan mala que puede echar por tierra la experiencia de juego al 70% de los jugadores, el control. Una vez dicho esto voy a explicaros un poco de que va el juego y por que el control resulta tan defectuoso, TW101 es un hack n slash en el que llevamos un pequeño ejercito de hasta 100 (o mas en algunas pantallas) personajes. No os asustéis, realmente lo manejamos como si solo lleváramos a uno, el resto nos siguen cuales Pikmins para que podamos realizar los movimientos de "hectofusión" que son la base del juego. Realizando con el segundo stick o con la pantalla táctil "dibujos" de figuras básicas (la figura varía dependiendo de la hectofusión que queramos usar) los personajillos se juntan formando elementos como un puño, una pistola, una espada, un látigo... y dependiendo del número de personajes que usemos en la hectofusión será mas o menos poderosa y gastaremos mas o menos "energía", que viene a ser la magia. Pero no solo para crear poderes sirve la hectofusión, también para ayudarnos a abrirnos camino por el escenario creando puentes o reconstruyendo elementos, por ejemplo.
La idea es muy buena, y combinar los distintos poderes en los combates es genial ya que los enemigos mas grandes requieren estrategias para eliminarlos rápidamente. El problema es que a la hora de ejecutar los dibujos el juego hace aguas, ni con la pantalla táctil ni con el stick se hace de manera satisfactoria, en muchísimas ocasiones esto nos desesperará por que veremos como morimos una y otra vez por lo poco pulido que está el control. Además para mas guasa el juego está plagado de QTE en los que tenemos que dibujar la figura acertada en muy poco tiempo, os aseguro que los primeros pueden llegar a ser realmente desesperantes. En mi caso sobre la segunda mitad del juego estos problemas estaban casi todos superados (menos el puto triángulo que se me resiste) y rara vez fallaba, con lo que la experiencia de juego deja de ser afectada por esto. Pero claro, el juego se va a las 20 horas muy fácil, y esto significa que las 10 primeras horas estamos cabreados con el control demasiadas veces.
Evidentemente esto destrozaría cualquier juego, ¿como cojones vas a perder 10 horas de tu vida en APRENDER a jugar bien a un puto juego? pero TW101 no es un juego cualquiera. He de decir que incluso en los momentos mas desesperantes el juego me ha divertido, y no solo eso, me ha fascinado. Estamos quizás ante uno de los juegos mas originales y con mas personalidad que han salido jamás al mercado. Por cada cabreo que te pillas por haber fallado una acción por culpa del control lamentable Kamiya te premia con alguna situación simplemente genial. El juego es un absoluto OMG constante, no deja espacio a que cierres la puta boca de tu asombro. Tan pronto estás repartiendo estopa como derribando una hidra gigante desde la torreta de una nave, pero también tendremos fases de disparos al mas puro estilo Starfox, otras estilo shoter isométrico y, agarraos, combates al mas puro estilo Punch-Out.
Os aseguro que TW101 me ha mostrado algunos de los mejores momentos que he visto jamás en un videojuego. Hay muchos momentos en los que dices ¿pero como puede molar tanto esta mierda? Sin lugar a dudas es el juego que mas capturas me ha hecho subir a Miiverse, con muchísima diferencia. Quizás sea por lo exagerado que es en todo, desde los Wonderful como equipo en general, que son una parodia a los superhéroes americanos, a cada personaje en concreto por si mismo. El humor absurdo del que hace gala todo el juego, para mi el mejor humor que hay, junto a la asombrosa capacidad que han tenido para crear situaciones épicas, una tras otra sin parar, consigue que insistas en que te guste a pesar de que el control te saca de quicio. Y la insistencia y la tenacidad se ve recompensada como en ningún otro juego que haya jugado jamás, pero esto puede no ser suficiente para muchos que tiren la toalla, y con razón, a las primeras horas de juego.
Pero es que parece que está hecho a mala leche, por que encima el juego es difícil. Conseguir las puntuaciones mas altas de cada etapa a mi me suena a simple utopía, está lejos de mi alcance, pero es que el simple hecho de avanzar en algunas zonas nos costará. No nos engañemos, la jugabilidad es compleja. No os lo había comentado pero no llevamos a los 100 Wonderful desde el principio, de hecho desbloquearlos a todos requiere explorar mucho los escenarios. En vez de eso podemos reclutar a los "civiles" que nos encontramos en las pantallas pidiendo ayuda, podemos reclutar peña hasta que tengamos 100 personajes bajo nuestro control. Estos civiles dejarán de estar contigo en el próximo nivel pero los miembros del equipo Wonderful que hayas encontrado se quedarán contigo hasta el final. Conviene conseguir un buen número de Wonderfuls ya que cuando llevamos pocos aliados es mas difícil "dibujar" las figuras de los hectopoderes y además no puedes hacerlas poderosas.
Así que tenemos un juego con una jugabilidad bastante compleja y con un control de pena, pero que divierte y te regala algunos de los mejores momentos a los mandos de una consola, no se que pensar. Es difícil saber si recomendar TW101, por que no se hasta que punto cada persona va a tener la suficiente paciencia para avanzar e ir descubriendo todos los momentos memorables que esconde. De verdad ojalá Kamiya hubiera pensado otro modo de usar la hectofusión, algo así como comandos de un juego de lucha seguidos de un botón, yo que se, cualquier cosa menos el sistema que han elegido. De no ser por eso estaría ante uno de los mejores juegos que he jugado en años, pero es que es imposible de obviar el hecho de que mucha gente lo ODIARÁ a las pocas horas y no querrá saber mas de el por culpa del sistema elegido. Además aunque yo he acabado cogiéndole el rollo tampoco estoy seguro de que todo el mundo lo haga.
Eso si, el que lo consiga tiene juego para rato, como ya he dicho la campaña se va a mas de 20 horas fácil, es muuuuy largo para un juego de este tipo. De hecho cuando crees que ya ha acabado hay un capitulo mas, y cuando lo acabas hay una misión mas, hasta el puto epílogo es jugable. Esto sin contar la cantidad de desbloqueables que tiene, los Wonderfuls, figuritas, fichas de aliados y enemigos, músicas... Todo va a parar al apartado de "extras" en el menú principal. Además si eres de esos masoquistas que quiere conseguir la máxima puntuación en las etapas (platino verdadero en este título) posiblemente el disco de juego se acabe fusionando con la consola. Por contra el que desespere quizás aguante 5 o 6 horas hasta que saque el disco para probar otro juego, que de diversión desde el minuto 1, y no lo vuelva a poner jamás.
Por lo demás hay que decir que el juego se ve bastante bien, las capturas no hacen justicia a lo que mola todo en movimiento. A pesar de que el juego llega a tener momentos de muchísima carga gráfica el motor no se resiente y todo va bastante fluido. No es que los Wonderfuls tengan la mayor carga poligonal del mundo pero siempre hay muchos elementos en pantalla entre amigos y enemigos. Además el look super hortera del que todos los personajes hacen gala mola bastante, gran parte de la personalidad y del sentido del humor de la obra de Kamiya se consigue gracias al genial apartado visual. La música va de la mano a lo que se ve en pantalla, todo muy épico, durante el juego acompaña la mar de bien pero no creo que nadie se compre el CD de la banda sonora original.
Pues poco mas que decir, The Wonderful 101 es un juego tan divertido como frustrante. Original como pocos (por no decir como ninguno) y con una colección de momentos que te llevarás a tu tumba gamer... pero con el control mas desastroso y menos intuitivo que te puedes echar a la cara. Yo no me atrevo a deciros que os lo compréis, el juego falla en un elemento demasiado importante como para hacerlo. Pero si por lo que sea os lo regalan, u os hacéis con el por voluntad propia... insistir, no os desaniméis, merece mucho la pena ser cabezones con el, quizás paséis del odio al amor sin daros cuenta.
NOTA: 7.5
@FastETC