Si hay una palabra anglosajona que los videojugadores nos hemos aprendido a la perfección durante los últimos dos lustros es “hype”. Que un producto cree muchísima expectación antes de su salida y que después el resultado no sea exactamente el esperado es algo que nos acompaña habitualmente desde hace bastante tiempo. Claro que hay casos y casos, hay veces que una gran puesta en escena mediática acaba en un juego del montón o en uno malo directamente (FF XIII por ejemplo), otras veces el exceso de expectativas hace que no valoremos en su justa medida el producto que acaba saliendo al mercado aun siendo un buen juego (Fable por poner otro famoso ejemplo). A Watch Dogs se le juntan muchas cosas, se le junta el haber sido presentado con un trailer hypervitaminado, el ser de una compañía “antipática” como Ubisoft y competir en un género en el que Rockstar campea a sus anchas con sus GTAs, Red Dead o incluso Bully. Al juego de la compañía de Rayman le estaban esperando desde hace tiempo, y no con los brazos abiertos, si no con la mano abierta.
Yo francamente creo que en el término medio está la virtud. Watch Dogs no es un juego que te cambiará la vida, en ninguno de los sentidos, creo que si hiciéramos la “hobbyconsolada” de analizar el juego por apartados en ninguno alcanzaría el sobresaliente, pero también os digo que no creo que suspendiese en ninguno de ellos. Estamos ante un juego con muchísimo trabajo detrás y eso se nota en seguida, es evidente que desde lo que se vio en aquel E3 de 2012 ha habido un downgrade importante, pero que nadie os lleve a confusiones, el tamaño de la ciudad, la cantidad de elementos en pantalla, la calidad de la vegetación, la variedad de los peatones... No es algo que se consiga con facilidad. Y eso que reconozco que el juego no me ha impresionado visualmente casi en ningún momento (aunque algunos efectos lumínicos o climáticos como la lluvia son absolutamente fetén), pero no me he caído de un guindo y se lo difícil que es adaptar un juego multiplataforma entre la “current” y la “nextgen”. Algunos me mencionaréis la espectacular pinta de GTA V para las nuevas consolas y el PC, pero tenéis que tener en cuenta que es una versión hecha a posteriori no un desarrollo conjunto.
Para mi el problema de Watch Dogs no se encuentra en el apartado visual, se encuentra en que tiene que competir con los juegos de Rockstar tanto a nivel jugable como en ambientación y guión, y desgraciadamente para Ubisoft no llega en ningún momento a tales cotas de calidad. Y eso que el juego intenta darle una vuelta de tuerca al género con el tema del hackeo, la posibilidad de jugar a tu antojo con muchos elementos de la ciudad, desde semáforos a cámaras de vigilancia e incluso los trenes. Es un factor indentitario del título de UBI con el que te familiarizas en seguida y que le da ese toque de distinción que le ayuda a alejarse de la impresión de ser un simple clon de GTA. Lo que pasa es que el sistema no se ve apoyado por unas misiones que lo hagan realmente divertido, ni las secundarias ni las principales, si tuviera que describir la acción del juego con un color sería “gris”. Zonas de sigilo poco inspiradas se cruzan con tiroteos de escasa emoción con problemas con las coberturas (mas de una vez verás al prota, Aiden, correr como un imbécil por el escenario por no interpretar bien a que cobertura moverse) y persecuciones monótonas. Es cierto que hay alguna misión que destaca por encima de otras, pero no es la tónica habitual, y ojo, no quiero decir que el juego sea aburrido, no lo es, pero le falta esa chispa de ingenio que le haga algo especial, algo en lo que piensas tras dejar de jugar.
Y es que me es imposible dejar de compararle con GTA V, porque cuando pienso en como quise a los personajes y a la historia del título de Rockstar no puedo evitar sentirme triste cuando pienso en Aiden, los secundarios y la aburrida historia que da lugar a los hechos en la Chicago virtual en la que se desarrolla la aventura. Sobretodo es remarcable lo difícil que es empatizar con el protagonista, en ningún momento te importa nada lo que ocurra con su vida ni lo que vaya a pasar en el siguiente acto del juego. Tiene una personalidad tan absolutamente plana que hace imposible que te gane para su causa, da igual que en las misiones se toquen temas como la privacidad de la gente, las peleas de gansters o la trata de blancas o la venganza personal, Aiden chafa la experiencia, creo que solo hubiese sido peor si le hubieran puesto el rostro de Ben Affleck o Hayden Christensen. A lo mejor pensáis que le estoy dando demasiada importancia a un tema que no es estrictamente culpa del juego, pero me parece que en según que géneros (y mas si se trata de una súper producción de tal calibre) tener un buen grado de inmersión sobre lo que ocurre tras la pantalla es muy importante.
Pero otro de sus mayores pecados siendo un título del género sandbox es el poco interés que despiertan la mayoría de las misiones secundarias. Y lo cierto es que hay muchas y muy variadas, desde persecuciones a asaltos a bases o interceptación de convoys, pero precisamente las mas ambiciosas, que son las de impedir delitos que surgen aleatoriamente, son algo confusas y cuesta un poco cogerlas el rollo. Se trata básicamente de llegar al punto del mapa donde se produce el delito y localizar tanto al agresor como a la víctima para intervenir en el momento preciso, el caso es que no acaba de funcionar bien ya que el agresor te interpreta como amenaza aunque estés rodeado de un montón de peatones mas, es un tanto absurdo y cuesta cogerle el punto. Es una pena porque se nota que el estudio quería hacer algo distinto, pero no han sabido bien casar el ir de santurrón con el género sandbox (incluso te penalizan en reputación por dañar peatones civiles ¿donde se ha visto eso? xD).
Tampoco me ha acabado de gustar el juego online implementado en el de un jugador. Mientras que en títulos como en el último Need for Speed me pareció una idea cojonuda en Watch Dogs no acaba de estar bien implementado. De repente te llega un aviso de que otro jugador te está hackeando escondido en un determinado radio y tu tienes que encontrarle, algo así como jugar al escondite, francamente a mi estas interrupciones me han causado mas molestia que otra cosa, llegando a apagar la consola por no tener que perder el tiempo en ese paripé. Tampoco he llegado a profundizar del todo en el tema online ya que simplemente no ha sido algo que haya conseguido llamar mi atención del modo adecuado.
Particularmente me da mucha pena ver como tanto trabajo se ha visto empañado por un mal guión, unos malos personajes y una mal enfoque de muchas de las misiones. Me da la impresión de que se han volcado tanto en hacer un buen entorno con la ciudad de Chicago que han dejado de lado facetas mucho mas importantes a la hora de encarar el juego. Pero bueno, al final se deja jugar y sin darte mucha cuenta vas avanzando en la historia, los buenos momentos de la aventura (que los tiene, sobretodo en el último acto) te dan ese empujoncito para seguir jugando a pesar de que en ningún momento te llegue a enamorar. La campaña principal es bastante larga y te ayuda a amortizar el juego aunque las secundarias no te entusiasmen demasiado, y eso es de agradecer. Se que con el tono que llevo durante todo el análisis da la impresión de que he hecho un esfuerzo por jugar, pero no es así, lo que pasa es que hay que dejar las cosas claras y Watch Dogs dista mucho de ser un juego que absorba, pero la falta de competencia en estos momentos juega mucho a su favor.
Al final, tras muchas horas manejando a Aiden y recorriendo Chicago, me quedo con la sensación de que el juego tiene unas buenas bases y podría haber dado mucho mas de si con un planteamiento mas inteligente. No es mal juego, pero carece totalmente de alma, es un quiero y no puedo por encarar a los pesos pesados del género. Pero aun así el juego está vendiendo muchísimo y seguro que habrá una segunda entrega, pero nadie se acordará de Watch Dogs tras acabarlo, y nadie perderá un minuto en pensar en él cuando GTA V para PS4, One y PC salga al mercado. Es curioso pero al final el Red Steel de esta generación no ha sido Zombi U...
NOTA: 6.5