André Perugia nació en Niza en 1893, de padre zapatero. Con 16 años se hizo cargo del taller de su padre. Exhibió sus zapatos en el Hotel Negresco, donde Poiret los vio, contratándole para que diseñara para él tras la I Guerra Mundial. Perugia no desaprovechó la ocasión, comenzando a hacerse con una clientela de la alta sociedad. Fue el primero de los diseñadores de zapatos de los "famosos": reinas, princesas, estrellas de los escenarios y de la gran pantalla fueron sus clientas.