Estoy seguro que todos tenéis anécdotas de vuestros lugares de trabajo, pero no estoy tan seguro de que en algunos sectores se generen tantas anécdotas como en el hotelero.
En este post voy a contar una en la que hoy estaba pensando.
El huésped viene y pide su coche, que como la mayoría es de alquiler, para irse al aeropuerto. Todo normal, hasta que nos llama Avis para decirnos que el huésped les había devuelto un coche que era de Europcar y que el suyo era el mismo modelo, pero distinta matrícula. Bajamos al parking y, efectivamente, ese coche lo teníamos nosotros. Antes que el otro huésped nos solicitase el coche tuvimos que ir rápidamente al aeropuerto, entregar el de Avis a Avis y recoger el de Europcar para dejarlo en el parking como si nada hubiese ocurrido. Al llegar, unos minutos más tarde, baja el otro huésped y nos solicita su coche, "por supuesto caballero, enseguida se lo subimos". Cosas que pasan en los hoteles.
Esta es una de tantas, pero hay veces que hasta te sorprende que no haya más.