Revista Economía
En 2007 el Banco Popular valía 20.000 millones de euros. Cuando Ángel Ron tuvo que salir del banco, su capitalización era de 3.000 millones de euros. Y ya no vale nada, sólo el Euro simbólico que ha pagado el Santander por él. Los accionistas lo han perdido todo, ahorradores que aportaran 2.500 millones en 2012, y otros 2.500 en 2016 para comprar acciones nuevas que hoy son papel mojado.Ángel Ron ha sido un verdadero incompetente para dirigir el banco. Engañó descaradamente a los accionistas, al asegurar que la entidad estaba bien saneada, para hacer esas ampliaciones de capital… que le permitían “salvar los muebles” de su penosa gestión. En 2006, tras la muerte de Javier Valls, se convirtió en presidente único. Y Ron, que es abogado y no economista, se embarcó en una fuerte expansión del crédito inmobiliario en un momento realmente malo. Y cuando el Popular estaba ahogado por estos créditos a promotores, Ángel Ron comienza una desesperada búsqueda de fondos: venta de activos no estratégicos; suspendiendo el pago de dividendos; cambiando hasta seis consejeros delegados para ver si alguno hacía un milagro...Para colmo de su ignorancia Ron se embarcó (2007) en la compra de TotalBank en Florida (USA), por 218 millones de dólares. Y remató al antiguo ejemplo de solvencia y rentabilidad de la banca española con la absorción de Banco Pastor en 2011. Ambas compras fueron un grave error. ¿Recuerdan a Pau Gasol como imagen corporativa del Banco?Cuando la burbuja del ladrillo pinchó en 2008 la entidad empezó a quedarse con activos inmobiliarios que no pagaban los préstamos. Y la morosidad de Banco Popular empezó a crecer sin parar, convirtiéndose en la entidad con mayor tasa de créditos impagados … incluso emitió 500 millones de bonos convertibles (2010) para reforzar su solvencia y amplió capital en 180 millones de euros para meter al Credit Mutuel francés como accionista.En 2012, el Popular registró unas pérdidas millonarias de 2.461 millones de euros, tras tener que provisionar 9.600 millones de euros. Ya era la crónica de una muerte anunciada. Aunque el expresidente cobrará una pensión de jubilación por 23 millones de euros…no es economista para saber gestionar un banco, pero es un mago para “su” economía. Ángel Ron pasará a la historia como el presidente más joven de un banco en España y como un nefasto gestor…“Aunque todo lo demás falle, siempre podemos asegurarnos la inmortalidad cometiendo algún error espectacular.” (John Kenneth Galbraith)
Mark de Zabaleta