Aquí dejo una breve recopilación de cómo las organizaciones animalistas, en su gran mayoría, se dedican a fomentar el especismo y a promover que la sociedad siga esclavizando a los animales nohumanos.
- La organización Faada promueve el consumo de "huevos ecológicos"
Las gallinas (y otros animales) no nos dan sus huevos. Otras personas se los roban. Ellas no han dado su consentimiento para que se los quiten. Por tanto, lo justo no es consumir huevos de marca "0" (cero), o de cualquier otra denominación. Lo justo es consumir cero huevos.
Quitarle, a alguien, algo que es suyo es explotarlo. Explotar a alguien significa tratarlo como si fuera un simple medio para conseguir un fin, ignorando sus intereses y su voluntad. El robo se encuadra dentro de la explotación. El consentimiento tiene que ser explícito. Si no es explícito entonces no hay consentimiento, por definición. No podemos saber lo que haría en el caso de poder dar su consentimiento. Así que es meramente especular. Al igual que el resto de animales nohumanos, las gallinas no pueden darnos su consentimiento, lo cual equivale a una negativa. Por tanto, no es justo utilizarlas en modo alguno.
Por causa del consumo de huevos, miles de millones de gallinas - y otros animales - en todo el mundo son privadas de libertad y enviadas al matadero cada día.
Todo lo referente a la cuestión del consumo de huevos lo sinteticé en dos artículos que enlazo a continuación:
- El numerito de los huevos
- El consumo de huevos es consumo de esclavitud
Consumir productos que provienen de la explotación animal no es respetar a los demás animales. Es justo lo contrario de respetarlos. El problema de fondo es seguir viendo a los demás animales como recursos que existen para beneficiarnos a nosotros. Ése es el problema principal. Todo lo demás son consecuencias de ese prejuicio.
Anima Naturalis en general se dedica a fomentar el especismo y la explotación de animales nohumanos. Aquí mismo se puede ver una campaña que asesora sobre la forma "correcta" de explotar los animales nohumanos que son esclavizados.
Si solamente se denuncia las "jaulas de gestación" entonces eso quiere decir que explotar a los nohumanos está bien si se hace sin esas jaulas. Es la consecuencia lógica que se deriva de esta campaña. Esto es lo que está promoviendo Anima Naturalis con esta campaña: que sigan explotando a los animales nohumanos pero sin esas jaulas determinadas.
Se suele alega que la intención de esta campaña es "reducir el sufrimiento" de los animales esclaviazados. Pero en verdad no existe ninguna prueba objetiva que demuestre que esa medida reduzca el sufrimiento. Además, intentar reducir el sufrimiento no justifica apoyar una campaña especista y que fomenta la explotación de animales nohumanos. Del mismo modo que intentar reducir el sufrimiento de las víctimas de la violación sexual no justifica que se hagan campañas a favor de una violación con "menos sufrimiento".
Con esta campaña no se consigue "reducir el sufrimiento" sino que en realidad se ayuda a perpetuarlo. En lugar de promover el veganismo, se promueve la explotación animal, con lo cual se desaprovecha una oportunidad para ayudar a la gente a que se haga vegana y se refuerza el prejuicio de que no hay nada de malo en utilizar a los demás animales para nuestros fines.
Lo cual sería como decir "Asesinato sí, pero legal". Éste es el animalismo del PACMA, y, en general, de todas las organizaciones especistas y bienestaristas que se dicen "defensoras de los animales"
Imaginemos que un defensor de los Derechos Humanos pidiera a los practicantes de la ablación (mutilación genital femenina) que deben ajustar su ritual de mutilación a las leyes actualmente vigentes. ¿Eso es promover los Derechos Humanos?
Si estamos en contra del asesinato de nohumanos entonces da igual si esa ley esclavista se cumple o no. Eso sólo le podría importar a alguien que está a favor de dicha ley. Los que estamos en contra de la explotación animal nos resulta indiferente, puesto que la ley es injusta en sí misma y no debería siquiera existir.
La cuestión es que no tenemos derecho a utilizar a los demás animales para nuestros fines. La cuestión es que hemos esclavizados a los nohumanos. Por tanto, lo justo es abolir dicha esclavitud. El sufrimiento no es la cuestión. La cuestión es la esclavitud y cualquier forma de utilización de animales nohumanos.
Ya basta de mentiras diciendo que todos "defendemos lo mismo" o que todos "estamos en el mismo barco." Estar en contra del sufrimiento no es lo mismo que estar en contra de la esclavitud. Lo primero es bienestarismo y lo segundo es veganismo. Son dos posturas distintas y no se pueden compatibilizar. Es mentira el tópico que "todos estamos en lo mismo". El bienestarismo es incompatible con el veganismo. Por desgracia, los bienestaristas que no comen animales se autodenominan veganos con lo crean más confusión de la que ya hay.
Nadie que promueva la explotación de animales nohumanos es vegano. En el caso de que nos importe míninamente la coherencia entre las ideas y las acciones. No importa qué consuma o haga en su vida personal. Animar a la gente a que asesine animales nohumanos de acuerdo con la legislación vigente es promover y apoyar la explotación especista.
Si estamos a favor del veganismo y los Derechos Animales, lo coherentes es que pidamos públicamente que la gente deje de comer animales nohumanos y de utilizarlos para cualquier propósito. Lo que no es coherente es que les animamos a que utilicen animales nohumanos de acuerdo con la actual legislación vigente que regula la esclavitud de los nohumanos.
El problema de fondo y lo que sucede en realidad es que los bienestaristas están en contra del sufrimiento. pero no están en contra de la esclavitud ni la explotación en sí misma. (Si están en contra de la esclavitud - o de ciertas formas de esclavitud - es porque consideran que provoca sufrimiento, pero si provocara placer entonces se pronunciarían a favor de la esclavitud). Y por lo tanto apoyan cualquier cosa - lo que fuera - que supuestamente ayude a reducir o eliminar el sufrimiento. Porque ése es su objetivo; y no el de respetar y proteger los derechos de los animales. Éste es el quid de la cuestión, y no otro.