Me he pasado todo el año esperando a que ocurriese algo, a que hubiese un cambio grande. Pero el año termina y las grandes medidas aún están por llegar. Tenemos encima de la mesa 10 medidas para recortar el gasto. Y las lees y parecen importantes: subida temporal de determinados impuestos, congelación de los salarios a funcionarios y el mínimo interprofesional, reducción de un 20% las subvenciones de los partidos políticos y sindicatos. ¿Y el otro 80% permanece intacto?
Llevo un tiempo intentando diferenciar las cosas importantes de las que realmente me importan. Y que frente a la mayor subida de impuestos de la historia de la democracia en España, que va a suponer una importante merma en la economía de las ya maltrechas clases medias, el gobierno haya mantenido intacto el 80% de los ingresos que perciben los partidos políticos, la patronal y los sindicatos para mantener sus enormes privilegios, me importa y me da la prueba definitiva para demostrar que nuestros dirigentes viven al margen de nuestros problemas y que prefieren seguir con sus privilegios por encima de nuestras carencias.
"Año nuevo, vida nueva" dicen por aquí. Uno de los grandes retos que hemos de marcarnos para este año es el de hacernos cargo de nuestras cosas y no delegar absolutamente todo a nuestros políticos. Estoy convencido que si no lo hacemos, ellos nunca abordarán las cosas que realmente nos importan.
Me he pasado la vida esperando a que pasara algo y al final, veo, que lo único que pasa es la vida. Y claro, eso no puede suceder.
Antonio de Miguel
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