Una marea humana -miles de personas, 15.000 según policía local- tomó el pasado domingo las calles de Santiago de Compostela entre la Alameda y la Plaza del Obradoiro en la manifestación 'En defensa do noso mar' convocada en respuesta a la marea de granulados o pellets que llegó a la costa gallega desde mediados de diciembre. A menos de un mes para que las elecciones autonómicas del 18 de febrero, la protesta contó con el apoyo de 130 colectivos y se convirtió en una protesta política que puso en cuestión la gestión de la Xunta de Galicia ante la crisis ambiental. La marcha, en la que estuvieron presentes todos los partidos excepto el PP y Vox, fue encabezada por dos manifestantes vestidos de calavera con cubos, palas y angazos, como representación de los voluntarios que participan en la limpieza de las playas, seguidos por otras personas portando coladores y escobas.
La protesta fue encabezada por un grupo de mariscadoras, representando las distintas agrupaciones, patrones mayores de cofradías, bateeiros, la plataforma PDRA, PLADEMAR Muros-Noia, ecologistas y sindicatos y, ya en la plaza del Obradoiro, tomó la palabra la actriz Isabel Risco. Zeltia Irevire puso la nota musical a una jornada cargada de reivindicación. En el manifiesto, denunciaron la “indefensión de nuestro litoral, de nuestro mar” ante la “marea de granulados tóxico” que inundó la costa y que “mostró una vez más cómo la Xunta de Galicia minimiza los problemas, ignora los datos científicos y no resuelve más que con mentiras e incompetencia”. “Nunca Máis”, gritaron, retomando el mensaje que resumió la indignación ciudadana tras el desastre del Prestige en 2002.
Ana Pontón, del partido Bloque Nacionalista Galego, señaló que, con esta protesta, el sector del mar “está rebelándose contra las mentiras” y lamentó que la Xunta “haya repetido”, ante esta “catástrofe de marea plástica”, el mismo modus operandi que durante el Prestige: “La ocultación, la mentira, la manipulación, la falta de respeto y la desprotección del medio ambiente”.
José Ramón Gómez Besteiro hizo un llamamiento a limpiar el mar de pellets y de “contaminación de mentiras” y explicó que el PSOE acudía a esta convocatoria “a la llamada de la gente del mar, de los pescadores, mariscadoras, biólogos, ecologistas y voluntarios”. Marta Lois, de Sumar, criticó la “incompetencia de Rueda y del Partido Popular” y recordó que, tras “14 años de políticas de dejade”", es tiempo ya de “dejar atrás esta etapa negra del Partido Popular en Galicia”. Irene Montero, ex ministra de Igualdad, criticó el “desastre de gestión” de los responsables del PP en la Xunta, a los que ve más “preocupados de proteger su propio partido y sus intereses que de proteger las costas de Galicia”. Podemos Galicia fue el primero en pedir la dimisión del conselleiro do Mar, Alfonso Villares, por su “incompetencia demostrada durante este desastre”.
Galicia se echa a la calle contra la gestión de la crisis de los pelles